Poco a poco la justicia nacional le fue pasando competencia en algunos delitos y la ciudad quedó desprotegida (habría excepciones que no conozco); consultadas doscientas personas en los últimos años señalan con indignación que “no saben a quién recurrir” ante la creciente anarquía, delitos, infracciones, alcoholismo en los jóvenes, tráfico de drogas, violencia, manifestaciones ruidosas (gritos, silbatos, bombos y uso excesivo de pirotecnia de alto poder) con cortes de calles y avenidas, tránsito desordenado y sin control, vendedores ambulantes indocumentados ocupando las veredas con mercadería de procedencia ilegal o de marcas falsificadas, patotas agresivas, destrucción impune del espacio público, indigentes acampando en calles y plazas de la ciudad, suciedad amontonada en todas partes, arrebatos de carteras y relojes en ómnibus, galerías comerciales, subterráneos y confiterías céntricas; flagelo de criminales "motochorros", robos a mano armada en todos los negocios, incendios intencionales de automóviles estacionados ("moda" juvenil), bares y kioscos ocupando la vía pública con mesas, sillas y mercadería colgando, accidentes graves en todas las esquinas, robos de automóviles, asaltos en edificios, crímenes permanentes, inseguridad que parece programada para dominar a los ciudadanos decentes mediante el terror ¿buscarán “no molestar” a todo tipo de marginales porque representan votos a favor?, los cordones de pobreza servirían para que algunos gobernantes compren voluntades en determinados momentos y puedan perpetuarse en los cargos. Un pueblo con conflictos sociales, inseguridad y vacío legal es fácil de manejar, especialmente cuando están quebrados los sistemas de salud y educación con impresionantes genocidios anuales de ancianos y niños sin recursos que mueren por hambre y enfermedades, olvidados por las autoridades; la población inculta y no influyente no se rebela y a la hora de los votos es comprada y engañada con promesas.
Según informes difundidos la semana pasada habría 11.000.000 de pobres en Argentina, los índices de inflación son muy altos e imparables, importantes obras sociales han sido vaciadas, los hospitales públicos están pasando la peor época, la clase media va camino a la extinción y los que se enriquecerían ilícitamente siguen cómodos y multiplicarían anualmente sus bienes y cuentas bancarias, quien se queja es considerado opositor y “enemigo”, los jueces que no obedecen son cuestionados, la prensa independiente se ha colocado otra camiseta por conveniencias (no generalizo), las únicas verdades que se conocen son rengas, los aplaudidores de “aciertos” políticos proliferan y el pan y circo y los dobles discursos son moneda corriente, premiándose valores éticos y morales cambiados; “la Biblia junto al Calefón” señaló el sabio y adelantado Discépolo en su tango “Cambalache”.
El jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (amigo de arrancar árboles históricos), fue por más y creó una nueva fuerza de seguridad: la Policía Metropolitana que por el momento es “fantasma”, la conocerían sólo en uno o dos barrios alejados y podrá cubrir la ciudad en un futuro muy lejano; mientras… seguridad cero para los contribuyentes que sólo ven saqueados sus bolsillos con grandes aumentos en los impuestos, irregular barrido, alumbrado y limpieza, precios exagerados propuestos para viajar en subterráneos, etc.
Las fiscalías en lo Penal, Contravencional y de Faltas serían “independientes” del poder político -aseguran funcionarios del área-, pero fue el jefe de Gobierno quien habría seleccionado a un “pollo de su gallinero” (dicho con respeto) para fiscal general, el que después fue aprobado por legisladores que sabían que así sería la milonga, entonces quedan dudas flotando en el ambiente. Explico: un amigo designado al frente del Ministerio Público Fiscal siempre responderá -aún secretamente- a su amigo jefe de Gobierno, desmentirlo sería como ofrecer chupetines al ciudadano adulto e insultar la inteligencia de los cultos (aunque no sean mayoría). A la vez, el fiscal general adjunto, ex integrante de la justicia nacional, también se manejaría en un patrón previamente establecido sin afectar los propósitos de su jefe y del jefe de Gobierno que aparentemente quiere ser Presidente de la Nación , ironía cuando no alcanzaría a hacer bien los deberes en la ciudad, en fin…, por eso estamos como estamos y tendremos cincuenta años más de permanencia en la cola del subdesarrollo, no por este señor precisamente, sino por todo el circo de ambiciones desmedidas que se observa en diferentes direcciones (no generalizo); la cuestión sería trepar y trepar, tener “la sartén por el mango”, meterse en una “burbuja” de poder y dirigir despachos públicos de espaldas a las necesidades de los ciudadanos.
Un detalle curioso: meses atrás había un número telefónico donde comunicarse con las Fiscalías Contravencionales siendo atendido inmediatamente por un funcionario de turno que enviaba patrullero policial al lugar, ahora se han “modernizado” y dejaron un contestador automático que no comunica (claro...los operadores siempre están "muy ocupados"), simplemente sugieren dirigirse por "correo electrónico". La cuestión sería trabajar lo menos posible, no atender urgencias y no molestar a los infractores para que los políticos (en el campo de lo supuesto) no pierdan votos futuros; además una máxima autoridad me comentó que cuando llaman de las fiscalías “ la Policía Federal demora hasta una hora en llegar porque no les hacen caso” (?). Otros entretelones desconozco, mejor que el lector y los damnificados saquen sus propias conclusiones.
En muchas emergencias tampoco atienden en el 911 y 107 (Policía Federal y auxilio de ambulancias municipales) y eso quedó reflejado en denuncias televisivas del público en los hechos desgraciados de ayer cuando las lluvias ( 195 mm .) en la Capital Federal ocasionaron inundaciones de viviendas, destrucción de automóviles, veredas y paredes en diferentes barrios, con más de 6 muertos, existiendo responsabilidad en gobernantes que frente al dolor de las víctimas se "entretienen" en peleas de conventillo buscando desacreditarse y cosechar "simpatizantes", sin atender las necesidades urgentes del pueblo ¿Qué opinará el Papa Francisco I?
La suciedad y basura acumulada en las calles se debe a la invasión permitida de cartoneros e indigentes que tapan desagües, alcantarillas, etc., estrategia política que obliga a los ciudadanos trabajadores y de clase media a convivir con cordones de pobreza que posibles "pícaros" desatienden ¿por desvíos de dinero? y van atenazando barrios céntricos y alrededores buscando elementos negociables, comida y techo en la puerta de los edificios, entre los que se mimetizan millares de vagos, viciosos y marginales convirtiendo la vía pública en depósitos de cosas podridas, trapos, papeles, maderas, pedazos de colchones, bolsas plásticas, botellas desparramadas, etc., materiales que ocasionan graves perjuicios los días de lluvia.
Cuando alguien radica una denuncia, las fiscalías en lo Penal, Contravencional y de Faltas anotan el domicilio real y número de teléfono; si la persona no tiene teléfono de contacto ellos no citan por cédula en la vivienda, sino que archivan las "actuaciones" y si lo hacen por teléfono habría agriedad y prepotencia en ciertos casos donde parece que la policía pudo haber “recomendado” a infractores amigos y si no responden a ese llamado dejarían mensaje de voz y luego mandarían al carajo la denuncia.
Revisando la página de los vecinos del barrio de Belgrano encontré innumerables fotografías, extensos informes e importantes denuncias, todo bajo el título “El Gobierno de la Ciudad Promueve la Ilegalidad , Corrupción, Violencia y Alimentos Vencidos”, en otro diario leí que hace 15 días clausuraron un conocido prostíbulo denominado “Brut” que sería propiedad de un ex agente de la Secretaría de Inteligencia del Estado que habría financiado la campaña del actual jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y el 22 de marzo pasado clausuraron un prostíbulo llamado “Black” (posiblemente habilitado como “local bailable”) ubicado en elegante barrio porteño que sería propiedad de un empresario que el año pasado viajó con la comitiva oficial a Angola, denuncia efectuada por la misma entidad que hace algunos meses descubrió mediante trabajo de cámara oculta, etc., que un juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sería propietario de seis departamentos usados como prostíbulos (las pruebas fueron mostradas por TV, etc.), donde trabajarían numerosas mujeres y se informó también que varias veces hubo denuncias de vecinos sin que los lugares fueran tocados por la policía ni autoridades de aplicación.
Respeto a las prostitutas que trabajan en un marco de reserva y honestidad, lo que me parece reprochable es que haya personas que las exploten como esclavas.
Picardías en la Policía Federal Argentina… (Parte II)
No podrían negar que desde décadas atrás las comisarías de la Capital Federal continúan manteniendo alto valor como “fondos de comercio” (no generalizo), "por falta de controles especiales" aseguran los vecinos porque "los vicios no han sido erradicados y parecen heredados”. ¿Alguna vez hubo directivas precisas para cortar el mal? ¿Aplicaron sanciones ejemplares? Muy espaciadamente “descubren” (léase: rara demora) casos de jefes y subalternos involucrados y publicitan con bombos y platillos presuntas “depuraciones” en los cuadros; creo que al sacar a una “manzana podrida” tendrían que trasladar lejos a todos los efectivos de la dependencia cuestionada, no sancionar a tres o cuatro y echar a uno o dos perejiles de abajo dejando impune al resto. Serían cadenas de connivencias, complicidades y encubrimientos, entonces tendrían que mover a todos a diferentes delegaciones del interior y áreas no operativas, no rotar a los jefes dentro de zonas céntricas supuestamente “recaudadoras” o después de ascenderlos regresarlos con más poder a dependencias que conocen demasiado.
Los casos sospechosos abundan ¿alguien controla con imparcialidad a la Seccional tercera? ¿se han preocupado por investigar las irregularidades y abusos de la Comisaría sexta? Son dos lugares clave céntricos, una con muchas vinculaciones en Tribunales y la otra en el Congreso nacional. Siempre van y vienen los mismos jefes dentro de determinados circuitos y hay personal que nunca fue cambiado de destino.
Numerosas jurisdicciones parecen liberadas al delito, los jefes de Zona y otros lo saben, los prostíbulos encubiertos trabajan con impunidad y presunto respaldo, los arrebatadores se mueven en grupos con tranquilidad, mientras policías, fiscales y jueces no pueden desconocer la situación, los hechos están a la vista, es decir, tendrían que observar brevemente la calle (aunque sea desde una ventana), revisar estadísticas, hacer un balance de denuncias acumuladas y archivadas, prestar atención a las quejas de ciudadanos en diarios serios y noticiarios televisivos comprometidos con la verdad, etc., padecimientos que son de trascendencia pública diaria y conocen las autoridades de aplicación.
La gente sale de compras, trabaja y vive aterrorizada en la Capital Federal , siendo robada permanentemente y a veces no hacen denuncias por temor a represalias a sabiendas que hoy pocas autoridades castigan los delitos, los reincidentes vuelven rápido a las mismas calles y jurisdicciones, siendo conocidos por todos los comerciantes. Se drogan, alcoholizan, agreden y asaltan frente a la inacción policial; es más, si hay denuncias por hurtos, ruidos molestos, desorden, agresiones, etc., los patrulleros demoran en llegar, lo que los damnificados juzgan como "intencional". ¿Y el Ministerio Público Fiscal? ¿Y las leyes y normas vigentes? Bien, gracias.
No generalizo, sé que en todas partes hay funcionarios dignos que trabajarían en silencio en bien de la sociedad y sobran policías de coraje que no dudarían en dar la vida para ayudar a un semejante, además cada vez que caen heroicamente en acto de servicio también la Patria resulta lastimada.
Conste que no hago responsables a todos los que ocupan cargos públicos (habría hombres éticos), es el sistema que parece funcionar con dificultades. Lo que más afecta a los argentinos sería la inseguridad (desprotección de personas y bienes) y ciertos "caciques" simularían no darse por enterados para mantener seguidores. Es mucho lo que los ciudadanos comunes ignoramos, cada área de aplicación respondería a directivas superiores y siempre el poder político sería el que mueve el tablero y si un funcionario competente decide plantarse y enderezar algunas cosas en bien del prójimo y normas vigentes, seguro molestará al entorno, podría arriesgar el cargo o sufrir presiones. “Donde manda capitán no manda marinero”, más sencillo sería trabajar poco (menos de lo necesario), no apartarse de límites impuestos, conformarse con vivir bien (el lujo es tentador), cuidar los buenos sueldos de arcas públicas, ahorrar dinero con una "varita mágica", invertir y retirarse con “la vaca atada” (cero drama económico). Si alguien pretende desmentirlo que me muestre funcionarios con poder de mando que vivan humildemente y ajustados exclusivamente a lo que posibilitan los sueldos recibidos.
Si los buenos ejemplos partieran de arriba, los de abajo no abusarían; si un subalterno camina por el sendero equivocado puede atribuirse a su mala esencia, si repetidas veces hay hombres de la función pública que son descubiertos en irregularidades será porque la raíz del mal está alrededor o más alto. Alguien lo sabe, tolera y sacaría beneficios en trastienda, entonces nunca van a cortar impunidad si sólo ven el árbol y no miran el bosque.
Un diario de Capital Federal publicó el 30 de marzo pasado que estarían investigando a ocho policías de la Federal (varios con antigüedad en el servicio) por prostituir a menores de edad en situación de calle, niñas que entregaban a otros miembros de la Fuerza aparentemente en el interior del Cuartel de la Montada (la noticia suena increíble) , hombres que habrían sido trasladados a las comisarías 5ª., 50ª., al Grupo Especial de Operaciones Federales, Cuerpo Guardia de Infantería y a una delegación de Salta (Norte de Argentina), investigación posiblemente iniciada en noviembre de 2011, causa penal N° 42.8l7 que según trascendidos derivó en la separación del cargo de los uniformados el 14 de marzo pasado; posible red de trata de personas (mencionan "secuestro" de menores indigentes) que llegó a conocimiento de la superioridad "por denuncia de un integrante de la Comisaría 2ª". Si los hechos son como los pintan y no le restan importancia, habría que investigar sin pausas en varias direcciones porque el Cuartel de Policía Montada estaría muy controlado por oficiales y jefes de "dura" disciplina, entonces estos suboficiales serían sólo la punta del ovillo. Estremece saber que pueda haber impunes.
El Centro, Zonas Liberadas, Delitos y otras Yerbas (Parte III)
El domingo 31 de marzo, a la hora 20,oo decidí recorrer con otro periodista algunas calles principales del centro; los teatros de avenida Corrientes tenían colas de personas de más de media cuadra, el movimiento de turistas era intenso, los bares, restaurantes y pizzerías estaban con todas sus mesas ocupadas; al llegar a calle Uruguay faltaba iluminación ¿otro descuido del jefe de Gobierno?, igual las mujeres y niños se sacaban fotografías en el banco donde están talladas como reales las figuras de dos actores muy queridos: Javier Portales y Alberto Olmedo, que sentados parecen “conversar” como hacían en un programa cómico de TV; esculturas que permanentemente son dañadas, les cortan pies, manos, las pintan, ensucian, etc., existiendo cámaras filmadoras de bancos y del Gobierno de la Ciudad (a quince metros está la Procuración General y a una cuadra el Palacio de Justicia), pero misteriosamente no hay autores identificados ni medidas de prevención ¿el comisario de la Seccional 3a., el jefe de Gobierno, fiscales y jueces miran para otro lado?
La Policía Metropolitana permanece ausente y la Comisaría 3ª de la Policía Federal mantiene todo el centro desprotegido ¿los uniformados nocturnos están presente sólo donde buscan comida y diarios gratis? ¿por alguna secreta razón liberan las calles al delito? Al llegar a Talcahuano, siempre por avenida Corrientes, varias personas discutían por un arrebato de cartera sufrido, al cruzar la Plaza de la República (sector Obelisco), faltaba iluminación y varios grupos de delincuentes -conocidos por la policía-, como todos los días acechaban a los transeúntes; Diagonal Norte y Cerrito (enfrente) tampoco tenía iluminación y había medianos vehículos blancos de transporte público en fila y otro sobre la peatonal en infracción; los medios de prensa y damnificados han denunciado hasta el cansancio a estas “combi” que no estarían habilitadas y trabajan todo el día obstaculizando con impunidad el tránsito ¿a qué “pez gordo” de la política sobornarán los empresarios?; la promocionada gigantografía del Sumo Pontífice Francisco, grabada en tela y colgada en edificio oficial que ocupa casi una cuadra en avda. Carlos Pellegrini entre Diagonal y Sarmiento (a pocos metros del Obelisco), no se veía porque el Gobierno de la Ciudad mantiene oscura la zona, cobrando a los vecinos ese ausente "alumbrado público".
Algo más referente al Sumo Pontífice: en un programa de "chimentos" de Canal 9 de TV (medio de inclinación oficialista), el martes 2 de abril alrededor de la hora 21,45 presentaron a un cantante italiano acompañado por músico con acordeón y una pareja vestida con trajes típicos; la segunda canción fue dedicada al Santo Padre con letra que lo mencionaba, me pareció conmovedor, pero desde el control -directivos o la producción- con total falta de respeto cortaron rápidamente y pasaron a la tanda publicitaria.
Volviendo a mi recorrida del domingo por el centro, al llegar a avda. Carlos Pellegrini entre Corrientes y Lavalle, la vereda estaba cubierta de manteros vendiendo mercadería de dudoso origen, varios grupos de arrebatadores “marcaban” a sus víctimas y el dueño de un kiosco de diarios y revistas de mitad de cuadra nos dijo “tengan cuidado, los delincuentes están robando desde temprano, por eso voy a cerrar”, “la comisaría no manda vigilancia”; al llegar a la peatonal Lavalle, entre decenas de transeúntes y familias sentadas alrededor de mesas de bares instaladas sobre Carlos Pellegrini, tiraron al piso a un señor mayor y lo golpearon para sacarle una cadenita del cuello, el dueño del kiosco de revistas que está en esa esquina frente a importante hotel, napolitano de nombre “Rino”, nos dijo: “no se queden porque les van a sacar todo", "los arrebatadores son muchos y están atacando a turistas y gente con carteras”, “creo que no voy a abrir más a la noche", "todos los comercios cierran temprano porque no hay policías y roban mucho”.
A la hora 21,20 aproximadamente regresamos por el mismo camino y en avda. Corrientes antes de llegar a Paraná -lugar de restaurantes y pizzerías- una señora italiana mayor le gritaba a tres policías que habían llegado en un patrullero: “ustedes no hacen nada”, “en Italia estas cosas no se ven”, “el gobierno de ustedes lo permite", “me robaron la cartera con todo”, al final la llevaron para asentar la denuncia en la Comisaría 3ª de Policía Federal . Un uniformado respondió: “no hay policías, no se puede cubrir el centro, además no nos quieren en la calle”. Continuamos hacia avda. Callao donde algunos comerciantes consultados coincidieron en responder: “antes había muchos delincuentes en esta cuadra, ahora se “mudaron” cerca del Obelisco a jurisdicción de la 3ª que no los molesta”.
Las comisarías 1ª, 3ª, 6ª y 7ª, son las que más liberarían zonas al delito y donde más quejas plantean los comerciantes y vecinos por la prepotencia del personal y los aparentes actos de corrupción que alguien de peso permitiría.
Prostíbulo Encubierto, Proteccionismo, Impunidad e Injusticias con Denunciante en Fiscalías (Parte IV)
Una honorable contribuyente lleva tres años denunciando a un prostíbulo encubierto en edificio de propiedad horizontal en Capital Federal donde la cadena de connivencias y encubrimientos parece amplia: incesantes ruidos molestos, reuniones hasta el amanecer, groserías, corridas por escaleras, etc., descontrol que tiene lugar de lunes a lunes, con el comprobado amparo de un comisario federal y algunos oficiales y subordinados que tendrían varias decenas de "kioscos" parecidos y de otro tipo para fáciles recaudaciones de dinero, funcionarios que podrían influir en fiscalías -especialmente contravencionales- en posibles consultas telefónicas, desvirtuando la realidad y enviando sumarios cargados de falsedades para favorecer a infractores “amigos”, es decir, mienten que "no constatan" los escándalos, mantendrían fluida comunicación con gente de vida irregular, los asesorarían traicionando deberes de servidores públicos y códigos éticos; redactarían parciales las exposiciones de damnificados y así el aparente prostíbulo sigue "intocable" (¿qué otra cosa esconderá el lugar?), los expedientes se archivarían rápido, no se investigan las denuncias y contra derecho en Cámara no habrían permitido la continuidad de causa frenada por un "popular" fiscal. Estas sospechosas irregularidades las ha comprobado damnificada que además fue amenazada y fotografiada por grupo de individuos de dudosa moral a modo de coacción porque los denunció, lo que tampoco motivó interés fiscal investigativo y así oficialmente habrían garantizado la impunidad.
Al lugar han visto llegar menores de edad de aspecto indigente o muy humildes (seguramente conocidos en las calles) los que luego serían engañados y no les pagarían lo que les prometerían, pero no es la cuestión que ha planteado la mujer por temor a la constatada cadena de proteccionismo, es decir, las denuncias han sido por reiterados ruidos molestos y otros actos abusivos. Imagine el lector honesto si alguien denunciara hechos más graves, los problemas que podría tener de parte de infractores e incluso de ciertos "administradores de justicia", tal vez por eso la ciudad está invadida por drogadictos, traficantes, prostíbulos encubiertos, no cede la explotación y trata de personas, etc.
Según datos fieles se trataría de un departamento chico que alquila un posible "maestro” de escuelas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (se llamaría J.E.F. de aprox. 50 años de edad), que a la vez subalquilaría a "amigos" y darían un uso indebido al departamento con conocimiento de la dueña, del portero, administrador y diversas autoridades. Por los hechos un abogado se comunicó -hace más de un año- con autoridades nacionales, con la jefatura del G.C.A.B.A. (por e-mail y telefónicamente), luego con el despacho del ministro de Educación, Dirección de Escuelas, etc., pero todos hicieron “oídos sordos”; esta señora fue tratada con arbitrariedad en fiscalías contravencionales donde tuvo que quejarse porque le negaron certificado de denuncia con el nombre del infractor, lo que notificó a la superioridad, impunidad que ha continuado vigente; otra señora mayor que sería propietaria denunció a los individuos diciendo "que llevaba dos años soportando molestias" y la exposición habría caído en acostumbrado "saco roto".
La policía frecuentaría el lugar -como otros “árboles frutales” de jurisdicción donde recogerían ganancias-, hechos notificados contra constancias al jefe de Zona, etc., aunque se sabe que parte de las coimas suben y se repartirían en sectores que parecen “ajenos” a estas telarañas. Perjudicada a diario, la primera señora volvió a denunciar ruidos molestos que hacen los individuos excediendo la "normal tolerancia". Entiéndase: trascienden el marco del prostíbulo y la mujer tiene que soportar los abusos por el amparo que ejercería una cadena de funcionarios ¿Por ser un "maestro" con credencial oficial? ¿Lo sostienen "padrinos"? ¿Negarán que existe corrupción alrededor de este asunto?
Durante Semana Santa los individuos habrían actuado como siempre con falta de consideración hacia señoras mayores vecinas que pretendían un poco de respeto por la especial fecha, mientras los que viven en una "burbuja" de poder (y abuso de autoridad), rodeados de custodios que paga el pueblo indefenso y sometido, seguramente pasaron estas Pascuas en tranquilidad en sus lujosos pisos de barrios selectos, en el exterior o en costosos caserones de campo.
Respeto a todas las autoridades pero el tema huele a podrido y sería sostenido desde sectores influyentes. Indudablemente, la falta de medidas correctivas salpica de vergüenza a instituciones oficiales.
Habría testimonios, grabaciones, fotografías y en el medio, delitos que no quieren investigar; por supuesto, se conocerían los nombres de diferentes funcionarios que no cumplen sus deberes y abusarían de autoridad tapando lo que un día puede convertirse en un escándalo público si llegara a trascender daño a un menor u otra cosa de difícil disfraz legal.
--------------------------------------------------------------
Carlos Estrada *(apolítico, hijo de hogar patricio), escritor, ex periodista parlamentario y ex columnista de revistas jurídicas, cronista especial de diversas publicaciones, periodista de investigación con documentada trayectoria pública desde 1970.
Ciudad de Buenos Aires, Argentina, 3 de abril de 2013.