El comandante Mike Bracken, un portavoz de la alianza en Nápoles, Italia, dijo que la OTAN se mantiene fiel a su mandato de proteger a los civiles. La alianza “no participa en las batallas sobre el terreno”, añadió, aunque reconoció que hace seguimiento a los combates entre los rebeldes y las fuerzas leales a Muamar el Kadafi.
El viceministro de Relaciones Exteriores libio Jaled Kaim había acusado a la OTAN de intensificar su campaña de bombardeos y apoyar mercenarios extranjeros para allanar el camino a los rebeldes que intentan derrocar a Kadafi en su avance hacia la capital del país.
En una entrevista con The Associated Press, Kaim dijo la mañana del jueves que el aumento en los bombardeos de los últimos días representa la “fase final” de la campaña aérea de la OTAN.