El can fue un regalo de la joven. Hüsch tomó a su pequeño y lo abofeteó violentamente hasta provocarle la pérdida de un diente, una conmoción cerebral y una contusión en el ojo, según informó Norbert Skalsk, policía de Betzdorf, Alemania. Personas indignadas averiguaron donde vivía el agresor y después de quitarle el perro, le dieron tremenda paliza. Tom-Jan Hüsch publicó las imágenes de como le dejaron el rostro. El joven en mención perdió la custodia de su mascota, que fue entregada a otra familia que se comprometió en darle el amor y los cuidados que necesita para recuperarse de la golpiza que le dio su antiguo dueño.