"Se descarta la reapertura de la central", ha asegurado Sato al reunirse ayer con el presidente Shimizu, quien a su vez ha presentado sus disculpas por el accidente de la planta tras el devastador terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo.
Según la agencia Kiodo, citada a su vez por la agencia oficial de noticias rusa RIA Novosti, tanto Shimizu como el presidente de la junta directiva de TEPCO, operadora de la central Fukushima-1, Tsunehisa Katsumata, abandonarán sus cargos próximamente, al asumir la responsabilidad por la crisis nuclear que atraviesa Japón.