La estrategia de Podemos es clara: situar a Ciudadanos como responsable de que ese parón se perpetúe. Incluso de que el PP pueda volver a gobernar, en caso de unas nuevas elecciones.
El encuentro con Sánchez ha sido, al fin y al cabo, la excusa de Iglesias para dar un nuevo golpe de mando. El primero lo intentó ya en enero, al imponerse como vicepresidente en un gobierno compartido con el PSOE.
Las claves:
Renuncia a la vicepresidencia, que nunca tuvo
Iglesias resume en ello su gran "cesión". La exigencia, hasta ahora firme, bloqueaba el acuerdo con el PSOE.
"Lo importante es que haya un gobierno que haga políticas", ha destacado el líder de Podemos. Ese gobierno, en cambio, es el suyo, el de los 161, como hoy lo ha rebautizado.
Iglesias está dispuesto a no ser vicepresidente- un cargo sin duda estratégico, del que depende el CNI y el BOE- pero no Podemos. De hecho, el secretario general ya ha dado nombres de quién podría ocuparlo. Bescansa, Domènech o Errejón.
Rivera, responsable ahora de la falta de gobierno
La intervención de Iglesias ha confirmado su estrategia. Por “responsabilidad de Estado”, ha dicho, recogiendo la misma muletilla que suele repetir Rivera, Ciudadanos debería permitir un gobierno “ de progreso”. Esto es, el de izquierdas, o a la valenciana, que propone junto con IU y Compromís.
Para ello, Iglesias está dispuesto a lo que pretende se interprete como otra "cesión": en los próximos días, si Rivera está conforme, ambos podrían mantener un encuentro.
Un gesto más teatral que otra cosa. Hasta el momento, el líder de Podemos bloqueaba cualquier negociación en la que estuviese presente el partido naranja. Ese diálogo, en cambio, no sería para buscar consensos, sino para atestiguar imposiciones. Iglesias quiere ‘convencer’ a Ciudadanos de que el acuerdo firmado con el PSOE no vale, no suma. Cree posible ablandarle con pactos puntuales en materia de regeneración democrática o lucha contra la corrupción, en lo que ambos partidos coinciden.
Si no acepta, el líder de Ciudadanos quedará como “culpable” de que el progreso no sea posible, de que el gobierno siga encallado, de que los españoles tengan que volver a las urnas. Podemos, en cambio, ha tratado de evitarlo, 'vende' Iglesias.
Quiere que C's se abstenga, pero Podemos no lo hará
Iglesias quiere que Rivera y sus diputados se abstengan para permitir su propuesta de gobierno. O, en el más difícil todavía, que vote a favor. Él, en cambio, no está dispuesto a abstenerse para facilitar lo contrario: que el pacto entre PSOE y Ciudadanos sea suficiente para gobernar.
Desplante a Errejón
La guerra interna en Podemos está lejos de apaciguarse. El de hoy ha sido un nuevo desplante de Iglesias al secretario de Política. Errejón no dirigirá, como venía haciendo hasta ahora, la comisión negociadora.
El también portavoz parlamentario de Podemos es el responsable de la estrategia del partido, pero Iglesias trata así de bloquearlo. La iniciativa de esa delegación la asumirá él, sus directrices también. Se sabe que Errejón es más proclive al acuerdo con el PSOE, Iglesias quiere mantener el mando de esas conversaciones.
FUENTE: LAINFORMACION.COM - POR LUZ SELA - 31/03/2016