“Lo que se sancionó es una ley de quiebra y no puedo permitir que el Estado quiebre'', dijo Kirchner al anunciar el veto de la norma, que había sido aprobada la madrugada del jueves en el Senado, donde el vicepresidente y titular del cuerpo, Julio Cobos, desempató la votación a favor de la oposición.
“Cuando se sanciona una norma que aumenta los egresos tiene que decir de dónde viene el financiamiento'', advirtió la mandataria, en relación a los 33,000 millones de pesos (US$8.250 millones) anuales en que fue estimado el costo del incremento.
El voto de Cobos favorable a la oposición le valió una lluvia de críticas por parte de funcionarios del gobierno, que volvieron a calificarlo de “traidor''.
La norma estipulaba que el haber mínimo de los jubilados será equivalente al 82 por ciento de los salarios base que cobran los trabajadores en actividad.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, había anticipado que la norma iba a ser vetada. Fernández agregó que la intención de la oposición es que el gobierno pague el costo político de un veto a un año de las elecciones presidenciales.
El aumento del haber mínimo de los jubilados al 82 por ciento de los salarios de los activos, que beneficiaría a 4 millones de retirados, es un antiguo reclamo del sector, mientras el gobierno dice que esa proporción sólo la tiene Luxemburgo donde, según Fernández, el ingreso per cápita es de “40,000 euros''.