1. Uso durante todo el año: Las pistas cubiertas permiten jugar sin importar las condiciones climáticas. Lluvia, viento o calor extremo no interrumpen la actividad. Así, se garantiza la continuidad del servicio y se maximiza la rentabilidad de la instalación durante los 12 meses del año.
2. Retorno de la inversión: Según datos del sector, una pista de pádel cubierta puede generar hasta un 50 % más de ingresos que una descubierta, gracias a su mayor disponibilidad y demanda. Además, este tipo de infraestructura facilita la organización de torneos, clases y alquileres nocturnos, lo que incrementa notablemente la rentabilidad por metro cuadrado. “Eso aumenta la rentabilidad por metro cuadrado”, explican desde Coverteg, empresa especializada en cubiertas deportivas.
3. Mejora de la imagen del centro deportivo: Incorporar pistas cubiertas aporta un valor diferencial a las instalaciones y posiciona al centro o municipio como un referente en infraestructura deportiva. Esto favorece la atracción de más usuarios, clubes, entrenadores y la celebración de eventos deportivos oficiales o amateurs.
4. Fomento del deporte base: Las pistas cubiertas son una herramienta clave para fomentar el deporte entre los más jóvenes y en colectivos sensibles. Permiten planificar actividades escolares y programas deportivos sin depender del clima, facilitando una continuidad formativa que fortalece la base del deporte local.
5. Menor mantenimiento: Al estar protegidas de los agentes externos como la lluvia, el sol o la suciedad, las pistas cubiertas requieren menos mantenimiento. Se reduce considerablemente el gasto en limpieza, pintura o reparaciones, y se prolonga la vida útil tanto del césped como de la estructura.
Crecimiento sin parar
La apuesta por el pádel no es casual: en España ya existen más de 16.000 pistas y se calcula que hay más de 100.000 jugadores federados, una cifra que crece cada año.
Esta expansión convierte al pádel en una oportunidad clara de desarrollo para centros deportivos y municipios que quieran modernizar su oferta, generar ingresos sostenibles y fomentar hábitos saludables en su población. Las pistas cubiertas, por su versatilidad y rentabilidad, representan el siguiente paso lógico en esta evolución.
(CN-05)