El viaje tuvo su magnífico colofón con una fiesta que organizaron las autoridades cubanas y Havanatur, en la playa del hotel Prisa, de Guardalavaca, donde se dieron cita 400 profesiones del sector turístico, pertenecientes a 12 países. La delegación española contó con agentes y periodistas de Valencia, Aragón, Castilla-La Mancha, Cataluña, Madrid, Canarias, Asturias y Cantabria.
Tras el alojamiento en el hotel Meliá Santiago, la primera visita fue a la Basílica de Nuestra Señora del Cobre, patrona de Cuba, donde queda patente la adoración de los lugareños a su patrona. Un recorrido por la ciudad obliga a acercarse hasta la plaza de la Revolución, con visita al Cuartel Moncada y su museo que recrea la historia de la revolución cubana. En el embarcadero de Punta Gorda se inicia un paseo en barco por la bahía de Santiago de Cuba para hacer una inmersión en la historia, conociendo mejor la batalla naval que allí se libró en 1898 y donde España perdió el control de sus últimos territorios coloniales.
Visita obligada es, también, el Castillo del Morro, una fortificación militar construida en 1.638 para proteger a la ciudad de los ataques navales de corsarios y piratas. El parque Céspedes, el paseo por los barrios coloniales, el Museo del Carnaval, la Casa de la Trova y el Museo del Ron son otros de los puntos de visita obligada.
En el corazón de la región se levanta La Gran Piedra, de 1.230 metros de altura, donde a finales del siglo XIX las colonias francesas iniciaron el cultivo del café. El Museo La Isabelica conserva en perfecto estado el primer cafetal de los colonos franceses y negros africanos.
Muy ilustrativa resulta la estancia en La Terraza de La Caridad, donde, a parte de degustar su gastronomía, te muestran el ritual de tostar café. En el Cementerio Santa Ifigenia reposan restos de importantes personalidades de la vida cultural y política de Cuba.
En pleno corazón de las montañas de la Sierra de Cristal está el municipio Segundo Frente – segundo productor de caña de azúcar de Cuba-, donde hay rutas para adentrarse en el mundo campesino. Cuenta con un mausoleo en el que se recuerda a los fallecidos en el bando republicano durante la guerra de liberación nacional.
La ciudad de Holguín es una visita emblemática. Allí te muestran el Parque de las Flores, la Plaza de la Marqueta, y la imprenta Editorial Papiro, además de La Bodeguita del Medio abierta en 2.017, donde se invita al visitante a dejar sus mensajes en las paredes de una de las franquicias más famosas de la isla.
Nuestro recorrido continúa rumbo a Banes, región conocida como la capital arqueológica de Cuba, donde se asienta el museo arqueológico y la Aldea Taina. El Mirador de la Loma de la Cruz tiene un ascenso de 458 escalones, si bien, también, se puede hacer en vehículo. Dicen los holguineros que los que no van a la Loma de la Cruz, es como si no hubieran visitado Holguín.
En la villa colonial de Gibara se encuentra la Batería Fernando VII, un fuerte amurallado levantado en 1.817, el único que tiene puente levadizo en funcionamiento. Todos los materiales que se emplearon en la edificación eran cubanos, pero el estilo es español. Tenía polvorín y en tiempos fue, también, prisión.
Cayo Saikia, de 42 kilómetros cuadrados, es una isla a la que se puede acceder a través de un puente construido en 1.902.
Si muchos son los atractivos paisajísticos y culturales de esta zona oriental, lo que seguro sorprende al turista es su rica oferta hotelera. Solo citaremos algunos: Iberostar Holguín Selección, Meliá Santiago, Segundo Frente, Río de Oro (Premio Mejor Resort de Cuba) y Prisa Guardalavaca.