La publicación de 520 páginas desvela muchas e interesantes aportaciones sobre los más de treinta fragmentos del Lignum Crucis que hay repartidos por el mundo, así como aporta el estudio de las cadenas que ataron a Cristo, que ha permanecido en el monasterio lebaniego que según la tradición, trajo Santo Toribio de Jerusalén.
El Libro, también, recoge información sobre los primeros peregrinos que llegaron desde la Montaña Palentina en la Edad Media; la localización de monasterios medievales, nuevas ermitas y la ubicación de capillas y altares en el monasterio.
Pedro Álvarez señaló que bajo la actual iglesia gótica del siglo XIII aparecen restos de dos templos románicos de los siglos del X al XII, levantados sobre una iglesia más primitiva que pudiera datarse entre los siglos VIII y IX.
El autor del libro confirmó que la ubicación de la cripta que albergó el cuerpo de Santo Toribio y las reliquias en la capilla del Lignum Crucis se encuentra delante del dosel del altar mayor del monasterio, que en estas fechas celebra todos los días, a las 12:00 horas, con gran asisrt3enia de fieles la Misa del Peregrino.