De acuerdo con la Oficina de Presupuesto del Congreso de los Estados Unidos (CBO, por sus siglas en inglés), para 2018, unos 14 millones de estadounidenses quedarían sin seguro si se aprueba el plan de salud presentado por el Partido Republicano y con el que se reemplazaría el ya agonizante Obamacare. Esta cifra aumentaría a 21 millones en 2020 y a 24 millones en 2026. "En 2026, se estima que 52 millones de personas estarían sin seguro, en comparación con los 28 millones que carecerían de este con base en la ley actual", dice el informe de 28 páginas de la CBO.
En un principio, este aumento en la cifra de personas sin seguro se debería a la deserción en masa de quienes se unieron al sistema de salud para evitar multas. Pero, las reducciones "en la cobertura de salud, entre 2018 y 2026, provendrían en gran parte de los cambios en la inscripción a Medicaid, porque algunos estados frenarían su expansión y algunos estados que la hubieran ampliado en el futuro elegirían no hacerlo", asegura esta entidad no partidista en su informe.
De acuerdo con el informe, estos cambios afectarían, sobre todo, a las personas entre 50 y 64 años. El aumento de personas sin seguro sería "desproporcionadamente mayor" entre esta población, dice el informe que será puesto a disposición del Congreso de los Estados Unidos para que sea tenido en cuenta a la hora de decidir sobre el American Health Care Act, presentado por los republicanos. El gobierno no la tiene fácil debido a que la oposición a este plan es creciente, incluso, entre los republicanos.
Pero el informe de la CBO resalta que de aprobarse este plan, el déficit de ese país, que ronda los 550 mil millones de dólares, se reduciría en 337 mil millones de dólares. De ese total, 323 mil millones de dólares se ahorrarían en presupuesto y otros 13 mil millones de dólares en ahorros por "fuera del presupuesto". El informe ya ha generado nuevos roces entre el gobierno y la oposición. "Decenas de millones perderán su cobertura, y millones más, en particular los adultos mayores, tendrán que pagar más por la atención médica", dijo el senador demócrata Chuck Schumer.
Por su parte, el gobierno estadounidense ha dicho que la CBO no revisó bien el plan presentado en la Cámara de Representantes. El secretario de Salud, Tom Price, dijo que es "imposible" que 14 millones de estadounidenses queden sin seguro en 2018. "Discordamos vigorosamente con el informe", dijo Price. Con ese panorama, el Congreso de los Estados Unidos se prepara para analizar este nuevo plan de salud, una de las mayores promesas de Donald Trump, antes de ser elegido presidente.