La Quesada pasiega, maravilla gastronómica

La distinción ha sido para María Ángeles Saínz, de “Sobaos Joselín” de la localidad cántabra de Selaya “un reconocimiento a la comarca pasiega y a toda la región” y, “un estímulo para seguir manteniendo la calidad, como lo hemos venido haciendo desde hace décadas”.compartir

Las quesada pasiega de Cantabria, las papas arrugadas típicas de Canarias, el jamón ibérico, el pulpo a la gallega, la paella valenciana, la tortilla de patatas y los papajotes murcianos son los platos típicos elegidos como 'Las 7 Maravillas Gastronómicas' en el concurso promovido por Allianz Global Assistance, entre más de 20 finalistas, como el gazpacho andaluz, la fabada asturiana o la ensaimada mallorquina.

Por la web oficial de la campaña, www.7maravillas.es , han pasado más de 400.000 visitantes, un 18% de los cuales procedían de EE.UU., China, Rusia, Canadá, India, Alemania, Francia, Reino Unido y Argentina. La iniciativa persigue el reconocimiento de las gastronomía española como Patrimonio Inmaterial de la Unesco.

Adolfo Gómez, de “Sobaos Serafina”, empresa ubicada en el polígono de Raos Santanderino, reconoce que el sobao es mucho más conocido a nivel nacional e internacional que la quesada, si bien señala que ésta tiene la suficiente calidad para servirse sola. En cuanto a la pregunta de por qué no se sirve en los restaurantes es categórico: “los restaurantes hacen postres caseros, como tartas y flanes, como estrategia empresarial, al sacarles un mayor rendimiento económico” y, además, “porque la quesada lleva tiempo y su elaboración es complicada, si se quiere calidad. Necesita leche fresca, sin pasteurizar, calentada a una temperatura concreta. Es un proceso muy artesanal” dice Fernando Fernández, de “Sobaos El Macho”, de Selaya.

RECETA

Para elaborar una quesada pasiega para cuatro personas se necesita 1 corteza de limón, 1 kilo de queso fresco pasiego o de queso fresco, 100 gramos de mantequilla, 4 huevos, 350 gramos de azúcar, canela y 125 gramos de harina.

La receta, que se recoge en el libro de Inés Butrón “Ruta Gastronómica por Cantabria” se empieza desmenuzando la mantequilla, a temperatura ambiente. Se desmenuza, también, el queso y se junta ambos mezclándolo todo bien. Sin dejar de remover el preparado, vamos añadiendo la harina. Una vez bien absorbida por la cremosa masa, incorporamos los huevos batidos, la corteza rallada, los 350 gramos de azúcar, la canela y seguimos removiendo.

Cuando la masa esté uniforme, la echamos en una cazuela baja y la metemos al horno donde debe permanecer unos 30 minutos a temperatura de 180 grados.