LONDRES 2012: España llegó a 28 medallas en la primera semana de los Juegos Paralímpicos

Con este resultado, España tiene ya 28 medallas (5 oros, 12 platas y 112 bronces) y ocupa la decimoséptima posición en el medallero teniendo en cuenta los oros en primer lugar, o la novena si se considera primordialmente el número total de medallas conseguidas en estos siete días.

China (60 oros, 50 platas y 49 bronces), Rusia (28-25-20), Gran Bretaña (25-36-31), Ucrania (22-17-20), Australia (22-16-23), Estados Unidos (21-18-25), Alemania (13-17-16), Brasil (12-8-5), Polonia (9-10-5) e Irán (8-5-5) son los diez primeros países del medallero.

El principal resultado de la delegación española lo consiguió el tándem Christian Venge-David Llauradó, que se hizo con la medalla de oro en la contrarreloj el primer día del ciclismo en ruta, disputado en un circuito de superbikes de ocho kilómetros en Brands Hatch, y retuvo así el primer puesto de Pekín 2008 en esta misma prueba.

Venge, que tiene deficiencia visual, y Llauradó, que compite como piloto, dominaron la prueba de principio a fin, sobre un recorrido de 24 kilómetros, es decir, tres vueltas al circuito. Ambos completaron la vuelta inicial en primera posición, con 17 segundos de ventaja sobre los que a la postre consiguieron la medalla de plata, los italianos Ivano Pizzi y Lucca Pizzi, cuartos en el primer parcial.

Mantuvieron este privilegio en el segundo paso por meta, con 16 segundos menos respecto de Pizzi-Pizzi y se afianzaron en el primer peldaño del podio al final, con un tiempo de 30´48"25, mientras que el tándem italiano recortó la desventaja hasta los 2"16 finales.

La medalla de plata de la jornada llegó de un histórico del deporte paralímpico español como Richard Oribe, que agrandó un poco más su palmarés al hacerse con el segundo puesto en los 100 libre, con el mérito añadido de que se trata de su 15ª presea en seis participaciones paralímpicas.

Oribe, de 38 años, con parálisis cerebral y que compite en la clase S4 (para discapacitados físicos y paralíticos cerebrales de grado medio), hizo un tiempo de 1’25”33, por los 1’24”28 del mexicano Gustavo Sánchez (oro) y los 1’25”76 del francés David Smetanine (bronce), eterno rival de Oribe en múltiples campeonatos internacionales.

Esta marca supone la mejor de Oribe en los seis Juegos Paralímpicos en los que ha participado. De hecho, se proclamó campeón en esta prueba en Atlanta’96 con 1’31”35 y desde entonces ha rebajado su tiempo en seis segundos.

Por otro lado, Maurice Eckhard, de 29 años y con parálisis cerebral, tuvo que pedalear para alzarse con el primero de los dos bronces de la jornada, el de la contrarreloj del ciclismo en ruta de la categoría C2 (para discapacitados físicos y paralíticos cerebrales de grado medio a severo).

Eckhard invirtió un tiempo de 24’40”76 en recorrer los 16 kilómetros de la prueba y se quedó a apenas 43 centésimas de la medalla de plata, lograda por el chino Guihua Liang, y a 5”64 del oro, en poder del alemán Tobias Graf.

Y el segundo bronce lo repartió Miguel Sagarra, miembro del Comité Ejecutivo del Comité Paralímpico Internacional y secretario general del Comité Paralímpico Español, en el Centro Acuático a José Antonio Marí por su tercer puesto en los 50 libre de la clase S9 (discapacitados físicos y paralíticos cerebrales moderados).

Marí, de 23 años y con discapacidad física, corroboró el pronóstico de serio candidato a la medalla al tocar la pared en 25”93, en una prueba en la que el australiano batió el récord del mundo (25”13) y el húngaro Tamas Toth fue segundo (25”75). El nadador valenciano inscribió así por primera vez su nombre en la relación de medallistas paralímpicos españoles.