"Hemos planteado a China nuestra preocupación sobre las acusaciones (de Google) y hemos pedido que las investiguen", dijo el portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, informó Efe.
Toner no ofreció más detalles sobre la conversación entre Washington y Pekín, aunque sí indicó que se produjo después de que el Gobierno chino negara su implicación en los ataques.
El portavoz indicó que la decisión de contactar con China se produjo por la "seriedad" de las acusaciones emitidas por Google.
No obstante, subrayó que EEUU esperará a que concluya la investigación abierta por la Oficina Federal de Investigación (FBI).
Google anunció el desmantelamiento de un "plan de robo de contraseñas de cientos de correos electrónicos de Gmail de altos funcionarios de EEUU, activistas políticos chinos", entre otros cargos estratégicos.