"Percibimos cierta degradación de su cadena de mando, pero tenemos que decir que, sobre el terreno (las fuerzas de Gadafi) siguen representado una grave amenaza", indicó Gortney.
En su comparecencia ante los medios de comunicación desde el Pentágono, Gortney señaló además que la coalición internacional liderada por Estados Unidos es consciente de que Gadafi está armando a miles de voluntarios para combatir contra las fuerzas rebeldes, e indicó que la coalición está invitando a los militares libios a que se mantengan en sus puestos y no obedezcan órdenes.
"Estamos instando a la desobediencia militar, no a que deserten", precisó Gortney, quien reconoció que los efectos de esta estrategia "todavía están por ver" porque son "difíciles de predecir".
El portavoz militar, quien negó que se esté empleando munición de uranio empobrecido en las operaciones --"sólo proyectiles de precisión"--, aseguró que la intervención militar contra las fuerzas de Gadafi será "tanto más eficaz conforme evolucionen las operaciones de vigilancia e investigación" que ahora se están llevando a cabo para diferenciar a las fuerzas rebeldes de los gadafistas.