La nueva propuesta museística está diseñada para que cada visitante se convierta en un explorador. A través de itinerarios personalizados, acompañados por una innovadora aplicación de móvil con realidad aumentada, mapas interactivos, películas 3D y dioramas, el museo invita a descubrir sus tesoros paleontológicos de forma dinámica y participativa. Tres recorridos distintos guían al público a lo largo de las salas expositivas, favoreciendo una comprensión activa y entretenida del contenido científico.
Entre las novedades destacan las instalaciones interactivas permanentes, audiovisuales explicativos, maquetas y mapas táctiles que permiten adaptar la visita a las necesidades de cada usuario, desde niños hasta expertos o visitantes con diversidad funcional. La combinación de recursos digitales y escenografías físicas transforma la visita en una experiencia inmersiva y multisensorial.
Un museo del siglo XXI
Con esta transformación, el museo da un paso firme hacia la museografía del siglo XXI. El objetivo es claro: atraer a un público más amplio, especialmente a un visitante tecnófilo y curioso que busca propuestas culturales accesibles, educativas y entretenidas. La integración de nuevas tecnologías no solo moderniza el discurso expositivo, sino que sitúa al centro valenciano en la vanguardia de los espacios científicos y culturales de España.
La reapertura marca el inicio de una segunda fase de renovación. El museo ya trabaja en el desarrollo de una nueva página web más accesible, un programa de visitas virtuales, contenidos educativos renovados y propuestas inclusivas que reforzarán su función como centro de divulgación científica para todos los públicos.
Un legado científico con más de un siglo de historia
El Paleontològic-Museu no solo renueva su formato, sino que pone en valor una de las colecciones paleontológicas más relevantes de Europa. En sus salas se conservan fósiles excepcionales del Pleistoceno sudamericano: una muestra compuesta por más de 5.000 huesos y una veintena de esqueletos que pertenecen a una veintena de familias distintas de mamíferos extintos.
El origen del museo se remonta al siglo XIX, con la colección reunida por Rodrigo Botet, figura clave en la creación del antiguo Museo Paleontológico. A lo largo del tiempo, la colección ha pasado por distintos emplazamientos —L’Almodí, el Ayuntamiento— hasta asentarse en 1999 en su actual ubicación con el nombre de Museo de Ciencias Naturales. Desde entonces, el fondo expositivo se ha enriquecido con otras colecciones notables como la malacología de Eduard Rosselló, la colección Siro de Fez o la de Torres Sala.
Ciencia, tecnología y emoción
La reapertura del Paleontològic-Museu de Col·leccions Naturals representa mucho más que una actualización de espacios: es una declaración de intenciones. El museo se posiciona como un espacio de divulgación científica donde convergen la emoción del descubrimiento, el respeto al patrimonio natural y la innovación tecnológica al servicio del conocimiento.
Con esta nueva etapa, València refuerza su compromiso con la cultura científica, la sostenibilidad turística y la educación accesible para todos. El museo invita desde ya a sus visitantes a convertirse en exploradores del pasado… con las herramientas del futuro.