Proclamado como el rey de los bacalaos, el skrei es un auténtico patanegra de la especie gadus morhua (una de las 60 especies de la familia de peces migratorios Gadidae). El skrei se establece como uno de los principales productos de exportación noruegos (se remonta al período histórico vikingo); además de constituirse en fuente indispensable de alimentación para las poblaciones costeras desde hace 10.000 años. Los primeros skreis de Noruega llegan estos días a los mercados, coincidiendo con la festividad de San Valentín (de ahí que sea conocido como “el pez del amor”). Los peces viajan desde el Mar de Barents - donde nació -, hasta sus zonas de desove frente a las islas de Lofoten y Vesterålen en la costa del norte de Noruega.
A esta singular especie de bacalao, se le puede considerar como un deportista de élite, y auténtico plusmarquista de largas distancias, puesto que recorre - a contracorriente -, más de 1.000 kilómetros antes de su captura. Por todo lo expuesto, el skrei, es el bacalao más sano, fuerte y magro de todos los de su especie, y excepcionalmente, se captura durante un corto espacio de tiempo cuando migra desde las gélidas aguas del Mar de Barents.
España se ha consolidado como primer mercado mundial para el skrei, motivo por el que el Consejo de Productos del Mar de Noruega (NSC) consideró organizar en el Mercado San Ildefonso de Madrid un showcooking a cuatro manos, interpretado por dos expertos elaboradores con los diferentes cortes de este bacalao: el chef noruego Cato Wara, y el mediático cocinero Sergio Fernández. Al acto de inauguración de temporada, acudieron el embajador de Noruega, Nils Haugstveit, acompañado de Björn Erik Stabell, director del NSC en España. Ambos dedicaron unas palabras destacando la extraordinaria calidad del skrei: “el Bacalao Nómada” (que es el significado de skrei en lengua noruega).
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