EL Rancho de Aldegüela - Segovia (Torre Caballeros)

El restaurante abierto desde 1987 y dirigido por un gran chef, Javier Giráldez con varias menciones en el mundillo gastronomico, ofrece una cocina atrevida e innovadora apostando por las nuevas tendencias, sin abandonar los asados tradicionales del cordero y el cochinillo en horno de leña como mandan los cánones, que es fruto de esta tierra segoviana.

Su bodega tiene todas las referencias d.o. de España e internacionales, cuenta con varios comedores con capacidad desde 50 a 100 comensales.

La casa fue hasta los 70, El horno de La Aldegüela, famoso en todo Segovia.

Pues bien éste que escribe, tuvo el privilegio de participar en unas nupcias muy importantes y déjenme decirles que el servicio fue sublime. Anécdota incluida o inocentada que en un principio, estuve a punto de tragarme. Mi mesa fue servida por un camarero, que noté o me pareció, un poco despistado, por sus modales profesionales. El primero de los detalles fue servirme la copa de vino hasta el borde y mostrármela, por el reverso; me dio pena porque sabia que me estaba sirviendo un gran vino. Por prudencia me callé, sabiendo la labor encomiable que está haciendo la Fundación Cándido en Segovia con las personas discapacitadas en su escuela de hostelería. No obstante, cuando me percaté que se acercaba a otras mesas sirviendo por el lado contrario y llenando las copas con el reverso de la mano izquierda, -uno, que se cree un profesional- no tuve más remedio que llamar a un gran profesional como es su director, Juan Lázaro. Él me sacó de mi espanto explicándome, que todo era una broma y que formaba parte del show y en verdad era un actor, la originalidad conllevó que el susodicho infiltrado, se llevó una sonora ovación. Lo que al principio me ofendió como critico gastronómico, pero ahora, sí recomiendo, a los que están leyendo estas líneas que si celebran algún evento en el rancho, no desechen esta oferta porque pasarán un rato inesperado y divertido.

Y pasando al menú de la boda, fue exquisito y de una altísima cocina mezclada con la tradicional, cochinillo incluido. Excuso decir que en su discoteca aunque uno es un poco longevo, estuvo bailando hasta altas horas de la madrugada pues la ocasión lo merecía y la oferta del discjockey era de lo más atrayente.

Desde estas paginas de EuroMundo Global mandar una felicitación efusiva a su director, Juan Lázaro por que es un peazo de profesional, pues estuvo manejando cinco eventos que se celebraban a la vez y eso lo dice todo.