Durante 2010, el número de trabajadores autónomos extranjeros aumentó un 0,7%, pasando de los 197.624 autónomos extranjeros en diciembre de 2009 a los 198.932 en diciembre de 2010, lo que en términos absolutos se tradujo en 1.308 trabajadores por cuenta propia más. Solamente el Régimen de Autónomos, el Agrario y el del Hogar han registrado durante el pasado año crecimientos en el número de trabajadores, perdiendo el total del sistema 33.068 trabajadores extranjeros y el Régimen General, por su parte, 40.731.
“Estos datos reflejan – señala Guillermo Guerrero, responsable del área de autónomos inmigrantes de ATA –, cómo ante el significativo descenso de trabajadores extranjeros del régimen general, el autoempleo se convierte en una salida y alternativa eficaz para muchos de ellos”.
A pesar del descenso registrado en los dos últimos meses, el cierre de 2010 en signos positivos responde fundamentalmente al crecimiento del colectivo de autónomos chinos, que se ha incrementado en 4.777 nuevos emprendedores (+17,4%) durante 2010. El contrapunto lo pone el colectivo de rumanos, que continúa su particular caída libre y ha descendido en 2010 en 2.367 autónomos, un -9,8% y el de ecuatorianos, con una pérdida de autónomos, a lo largo del pasado ejercicio, del -7,2%.
En cuanto a los sectores de actividad, la construcción sigue siendo el más castigado, con una pérdida de 5.787 autónomos extranjeros a lo largo de 2010, siendo éste el que mayor porcentaje de autónomos rumanos y ecuatorianos registra. Sin embargo, estas bajas se compensan con el aumento de negocios de hostería y el comercio, que vieron incrementar el número de emprendedores un 5,6% en el caso de la hostelería (2.060 autónomos extranjeros más) y un 7,6% en el del comercio (3930 nuevos autónomos).
“Estos crecimientos en hostelería y comercio – señala Guillermo Guerrero – están directamente relacionados con el crecimiento de autónomos chinos, nacionalidad que se concentra fundamentalmente en estos dos sectores.
“Es alentador – apunta el responsable del área de autónomos inmigrantes de ATA – que únicamente cuatro sectores (construcción (-15,6%), actividades administrativas (-6,2%), agricultura (-4%) y actividades inmobiliarias (-2,3%) registran pérdidas de afiliación de emprendedores inmigrantes, esto demuestra que los emprendedores extranjeros no se centran únicamente en dos sectores de actividad sino que se diversifica sectorialmente su crecimiento, especialmente comercio (+7,6%), información y comunicación (+7,2%), educación (+6,3%) y hostelería (+5,6%), lo que convierte al trabajo autónomo en una salida efectiva para muchos trabajadores extranjeros para reincorporarse al mercado laboral”.
Si nos atenemos al género, las mujeres extranjeras que han iniciado una actividad económica en 2010 han aumentado significativamente (6,1%), mientras que los negocios encabezados por varones han disminuido un -2%, “uno de los factores que motivan estos datos es la existencia de una mayor cuantía económica en las ayudas al emprendimiento femenino”, apunta Guerrero.
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