Lugo afirma que los paraguayos no aceptarán su juicio político sin razones

"Siempre he dicho que mientras no haya un motivo racional para justificar un juicio político el presidente Lugo no se va a preocupar", dijo en una entrevista con Efe el mandatario paraguayo.

La ciudadanía "no va a aceptar tan fácilmente un juicio político mientras no hayan motivos racionales justificados que desemboquen en ese procedimiento", subrayó.

Lugo, ex obispo católico, ganó las elecciones del 20 de abril del 2008 y en agosto de ese año asumió la presidencia, lo que terminó con más de seis décadas de gobiernos del Partido Colorado.

Desde hace semanas se repiten las amenazas públicas de someter a un juicio político al presidente, tanto por parte de parlamentarios de la oposición como del Partido Radical Liberal Auténtico (PRLA), principal sustento del Gobierno en el Congreso.

Los motivos son varios y tienen que ver con el desempeño de sus funciones y no con aspectos de su vida privada, como las demandas por paternidad que afronta.

Alfredo Jaeggli, del PLRA y principal detractor del jefe de Estado, considera que Lugo debería ser enjuiciado por la presunta pasividad de las autoridades en un sonado caso de secuestro, así como por las denuncias de irregularidades en un proceso de compra de tierras para la reforma agraria.

"Si bien muchos dicen que eso (el juicio) depende de los numeros, de los cálculos de los votos con que pueda contar el pedido en el Congreso, creo que también depende de la racionalidad política, de las motivaciones y de los motivos que hayan para un procedimiento de este tipo", señaló Lugo.

Para enjuiciar al jefe de Estado es necesario que la denuncia sea respaldada por dos tercios de los presentes en la sesión de la Cámara de Diputados, de 80 miembros y que ejerce como ente fiscal.

Posteriormente, la acusación pasa al Senado, donde es necesario el voto a favor de 30 de sus 45 miembros.

Lugo reconoció que las relaciones con el Parlamento "podrían ser mejores" y destacó que "la composición del Congreso, en donde el Ejecutivo no tiene una mayoría, ha hecho que muchos de los proyectos sigan cuesta arriba, con ciertas dificultades".

No obstante, reconoció que "el Congreso ha tenido también un gesto generoso, especialmente en el tema de la crisis (financiera), no así con el recorte presupuestario del ala social del Gobierno, que están siendo mutilados. Si bien, no han sido aprobados y todavía se puede conversar".

La comisión bicameral del Congreso recortó hace pocos días los recursos para algunos ministerios, como el de Acción Social, en el Presupuesto General de Gastos para el 2010, lo que, según Lugo, afectará a los "más pobres".

Estos recortes contaron con el apoyo de parlamentarios del PLRA, partido que cuenta con cuatro ministerios y es la segunda fuerza política tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

No obstante, igual que el Partido Colorado, los representantes liberales esta divididos en varios grupos parlamentarios, por lo que Lugo comentó que "el PLRA es un caso 'sui generis' en el Parlamento".

Agregó que "su división interna hace que el partido sea ingobernable. Ahora hay cambio en la presidencia, esperemos que vuelva la institucionalidad para que dentro de la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), el aporte del PLRA, que es grande, siempre sea fructuoso".

La APC fue la alianza electoral que lideró Lugo para vencer las elecciones y aunque está dominada por grupos extraparlamentarios de izquierda el PLRA, de centroderecha, es su organización insignia.