Claro, esos eran otros tiempos, quizás antes de la cadena de clásicos entre Real Madrid y Barcelona sucedidos entre el final de la temporada pasada y de la que recién culminó. Verdaderas guerras que iniciaban días antes y terminaban otros tantos después, con rencillas en el campo de juego, sobre las cuales el propio Del Bosque había advertido e incluso había manifestado preocupación por tratarse de jugadores del seleccionado nacional.
Y es que a diferencia de lo que suelen hacer los entrenadores, que barren todo puerta para adentro, el Marqués dejó claro en una entrevista con el programa 'Fora de Joc' de ONA FM, que las diferencias entre Sergio Ramos y Gerard Piqué, los principales candidatos a ser la pareja titular de centrales en la Eurocopa 2012 con España, existen: "Si no se llevan bien, que se lleven, porque en el campo es donde se tienen que llevar bien. Son chavales jóvenes que no van a tener ningún problema. Ya han jugado juntos y hay episodios que son ya pasado. Lo principal es que tengan buen corazón y nada más".
Las malas lenguas dicen que la pica ya venía desde que acabó el Mundial, cuando en una rueda de prensa, Ramos se mostró molesto porque su compañero de equipo contestó unas preguntas en catalán. Sin embargo, los peores problemas fueron precisamente en los clásicos de las últimas temporadas, donde protagonizaron hechos que para muchos, no han quedado en el olvido, como cuando Piqué mostró al Camp Nou la famosa manita tras el 5-0 al Real Madrid, en el mismo encuentro en que Ramos fue expulsado por una fea entrada sobre Messi.
Otro de los cruces se sucedió en el Santiago Bernabéu, en el clásico de la Liga que acabó con empate a 1 y que se jugó unos días antes de la Final de la Copa del Rey, cuando el barcelonista comentó, camino a los vestidores: "Os hemos ganado la Liga y ahora vamos a ganar vuestra Copa", cosa que finalmente no sucedió, pues el vencedor en Mestalla, fue el conjunto merengue.
Pero como el propio Del Bosque se ha encargado de destacar siempre que el buen ambiente ha sido el claro dominador en estos últimos años y la auténtica clave del éxito de la Selección Española, y procura que todo siga de la misma manera, apela a la profesionalidad de ambos futbolistas, que es la que debe estar por encima de todo.