El Triunfo De La Informalidad

Eso es lo que ofrece Vino Tinto, la nueva neotaberna que ha abierto al público en la calle Jorge Juan, en la milla de oro de la gastronomía selecta en la capital. Su moderna decoración, con elementos vitivinícolas para remarcar el concepto; su carta a base de raciones y pinchos; el horario continuado (su cocina abre hasta las 00.00h todos los días de la semana), y la concepción de un espacio dividido donde tapear o sentarte a la mesa para disfrutar de las maravillas de la cocina española hacen de este espacio un culto a la informalidad bien entendida, la evolución natural y gourmet del tapeo clásico, del after work selecto.

Jorge Juan, 8, ni más ni menos. Entre Serrano y Claudio Coello, al inicio de la calle más culinaria de Madrid, una coqueta terraza que abre todo el año presenta un local diferente, feudo de jóvenes, no tan jóvenes y adultos con mente abierta. Vino Tinto recibe al divertido huésped en un bar de tapas y pinchos renovado, un lounge de mesas altas –barricas recicladas- para el picoteo donde la conversación surge sola. Ideal para los primeros vinos (o cañas), para el after work entre amigos y compañeros (posee carta de licores Premium) e incluso para cenar a base de raciones sin la necesidad de sentarse, la barra de Vino Tinto entra por los ojos y por la garganta, con una selección de 50 referencias nacionales e internacionales de vino que cambia cada semana.

La estética funcional y bodeguera de la barra se hace extensible a sendos comedores, uno de ellos con la parrilla vista. Allí, las paredes hablan y nos cuentan la carta gastronómica y de bebidas, que también puede consultarse en mano con un formato en madera acorde con la propuesta del local. En el techo, un entramado de maderas de barrica hace las veces de lámpara y proporciona el ambiente adecuado, que completa el mobiliario, cómodo y cambiante de mesa a mesa. Tanto en barra como en los comedores, Vino Tinto no defrauda al paladar. Como si la abuela ejercitara, de sus fogones sale cocina española bien presentada (en pizarras y sartenes), con especial atención a sus ya famosas mini hamburguesas, a unas croquetas jugosas y tiernas, a sus ensaladas o a sus especialidades marinas donde destaca el pulpo o la sepia. El chuletón de buey (de casi 1kg.) se presenta ideal para los más carnívoros, que pueden completar un menú gustoso con un sorbete de frambuesa y vino tinto, cómo no. Y, para los gourmet, el restaurante pone a disposición tres menús degustación, con delicias españolas reinventadas bajo el sello Vino Tinto, que también posee otro local en Madrid (Infanta Mercedes), uno en Mallorca y un último en la localidad portuguesa de Oporto.

Con menos de un año de vida, esta nueva propuesta se ha asentado entre el tapeo chic de Salamanca por su presentación desenfada y por su precio (el precio medio es de 20€ pero hay menú del día por 14,50€. Menús degustación de 28 a 42€), pero es por su familiaridad por la que permanecerá en Madrid como incunable. Entrar en Vino Tinto es entrar en casa, es comer y divertirte con los tuyos, como en casa, es saber disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Además, para completar su oferta, el local cuenta con dos reservados acondicionados para fiestas y celebraciones (con estética de bodega, también sirven de comedores diarios) y puede confeccionar para las mismas menús de cócteles. Es Vino Tinto, el ejemplo perfecto de fusión entre glamour y tradición demandada.

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Dirección: Jorge Juan, 8 - Teléfono: 91 140 34 17 - Web: www.vinotinto.es