Quizás muchos no lo recuerden pero el famoso “Plan Zeta” fue una rocambolesca historia inventada por las afiebradas mentes de los exegetas de la dictadura militar y que fue a dada a la luz pública pocos días después del 11SEP73 como la más retorcida y maquiavélica maniobra de aniquilamiento de cualquiera que fuera opositor al gobierno de la UP.
Según decían quienes tuvieron acceso a los miles de documentos atribuidos al “Plan Zeta”, había detallados informes de opositores a la UP con todos los datos posibles: desde nombre completo y fecha de nacimiento, hasta informes de costumbres domésticas y otras “menos santas” al decir de quienes revisaron aquella montaña de papeles. Con el correr de los días, la “rumorología” hizo aumentar a límites increíbles, la nómina de los “descartables” incluidos en ese maléfico plan al punto que sólo se libraban de no estar apuntados en aquella lista negra, los parias y los miserables que no importaban a nadie ni para nada. Entonces, de un día a otro, la lista del “Plan Zeta” llegó a constituir el mejor referente y aval de notoriedad socio-económica y miles de conversaciones telefónicas se entrecruzaron para comunicar a parientes, amistades y conocidos, el “empujón social” que anexaba la noticia: “¿Supiste que estos malnacidos de la UP me tenían incluido en el Plan Zeta?”. Con el tiempo, se consideró en Chile que “sólo los rotos” no estaban en el “Plan Zeta”..
Con WikiLeaks, ha pasado un poco lo mismo. En un principio, sólo los “grandes”, en términos de países, políticos y líderes del mundo, parecían ser los únicos incluidos en los chismosos cables enviados los chivatos y copuchentos funcionarios norteamericanos. Muchos asesores presidenciales de mandatarios de países más pequeños estaban francamente preocupados por la ninguna mención hecha a sus respectivos presidentes: “Si no estás en WikiLeaks es que no existes o no tienes ninguna importancia” se llegó a decir. Los asesores presidenciales de Piñera por ejemplo, miraban con preocupación como pasaban los días y ninguna referencia al dinámico y “lifteado” presidente aparecía en ninguno de los periódicos que tienen la exclusiva para reproducir los cables filtrados por WikiLeaks y que, como se sabe, son apenas cinco rotativos en el mundo entero y casi todos de Europa.
“Menos mal, aseguró un asesor comunicacional de Piñera”, que ayer lunes, por fin, ya ha aparecido una alusión al presidente Piñera que aunque es de su época en que aún era candidato, viene a decir la importancia que tiene nuestro país en el concierto internacional. Había cierta preocupación, -agregó el funcionario-, porque incluso Evo Morales había ya aparecido mas de una vez en los cables de WikiLeaks”.
Por otra parte, agregó el mismo funcionario,. “Hay que tomar en cuenta que el gobierno de EEUU ha llamado para disculparse con Chile y eso… ni siquiera lo ha hecho con países europeos, lo cual viene a reforzar más nuestra imagen, concluyó el funcionario que prefirió no identificarse para ahorrarse eventuales críticas de los periodistas o de la oposición.
Otro alto funcionario del gobierno y que tampoco quiso identificarse refirió que “con WikiLeaks se cumple aquello que decía Oscar Wilde: No importa si hablan bien o mal de ti. Lo importante es que hablen”