Como en cualquier otro aspecto relacionado con el desarrollo de los niños, contar con las marcas profesionales más especializadas en el calzado infantil, es la mejor opción para cuidar de sus pequeños pies en crecimiento.
En España una de las marcas del sector que recibe mejores opiniones es Biomecanics, cuya especialización es precisamente la fabricación de calzado infantil respetuoso con el crecimiento de sus pies.
También es importante tener en cuenta que para los niños no sirve cualquier calzado. El problema es que en muchos negocios se comercializan zapatos infantiles como "miniaturas" de modelos de adulto, cuando en realidad sus necesidades son muy distintas. O aparecen modas y corrientes que no son adecuadas para el correcto desarrollo del pie.
Por este motivo, Biomecanics consigue su reconocimiento actual, al fabricar un calzado que le ofrezca protección y, al mismo tiempo, permita una evolución natural del pie.
Biomecanics y su compromiso con el cuidado del pie de los niños
Para entender el compromiso que Biomecanics ha adquirido respecto a la fabricación de un calzado infantil respetuoso con este crecimiento, hay que conocer sus orígenes.
La marca surge de una colaboración entre Grupo Garvalín y el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV), que tuvo lugar en el año 1996.
En esta acción conjunta, se analizaron las necesidades que tienen los niños en cuanto a calzado, en función de las etapas de desarrollo por las que pasan.
La investigación permitió encontrar información muy interesante al respecto de las necesidades de un calzado infantil y expuso la poca oferta que existía realmente de zapatos para niños con estas especificaciones.
Ante esta necesidad, Grupo Garvalín impulsó la creación de la marca Biomecanics, como un sello de confianza y garantía para los padres interesados en comprar un calzado para sus hijos, que realmente se preocupase del crecimiento de sus pies.
Las opiniones sobre Biomecanics y sus líneas de calzado infantil, adaptadas a cada etapa de crecimiento del pie del niño, fueron de inmediato positivas al confirmar los beneficios que ofrecen a los pequeños.
De hecho, desde su fundación hasta la actualidad, la marca sigue colaborando con el IBV (es la única en España que lo hace), con el fin de seguir mejorando en la fabricación de calzado infantil que tenga en cuenta todas estas necesidades basadas en la evidencia científica. También cuenta con el aval de la Asociación Española de Enfermería Pediátrica.
Elementos clave del cuidado del pie
La colaboración con estas instituciones y la investigación continuada de qué necesita el pie del niño en cuanto a calzado, ha permitido identificar los elementos clave a tener en cuenta en su fabricación.
En opiniones de Biomecanics, para garantizar un óptimo cuidado del pie del niño, el calzado que utilice tendrá que cumplir estos criterios:
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Debe permitir un crecimiento libre del pie, sin opresión de ningún tipo y sin apretarle, tan solo ofrecerle la sujeción adecuada a través de una estructura funcional mínima como su estabilizador externo flexible.
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Debe garantizar una protección para el pie y los dedos, tanto respecto a elementos externos como también a nivel interno. El pequeño debe ir tan cómodo como seguro. Tampoco debe contar con acabados en su interior que puedan provocar rozaduras o heridas.
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Debe facilitar las acciones complementarias todavía vinculadas al crecimiento del pequeño. Por ejemplo, tiene que servir para que pueda impulsarse al gatear o que mantenga la estabilidad aprendida cuando intente ponerse de pie.
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Debe permitir opciones de cuidado del pie y de un mantenimiento saludable, para que no sufra problemas como infecciones por humedad y los materiales deben ser libres de tóxicos.
Biomecanics: Opiniones sobre el cuidado del pie con su calzado infantil
Biomecanics consigue opiniones favorables por las líneas de calzado infantil que tiene, con las que cumple todos los criterios descritos para ofrecer a los pequeños justo lo que necesitan.
La primera de esas líneas es Biogateo, un calzado infantil pensado para la etapa de gateo y primeros pasos.
Este calzado cuenta con un diseño y unos materiales, que respetan el crecimiento del pie de los más pequeños y tiene en cuenta sus necesidades:
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Cuenta con una horma ancha con la que puede mover los dedos del pie con libertad.
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Su suela es fina y ligera.
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Es un calzado que destaca por su dorsiflexión en la suela, para permitir así la movilidad del pie en todas las direcciones.
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Para los más pequeños, se aprovecha una punta adherente que facilita la propulsión al gatear. Con el tiempo, se usa una puntera reforzada que protegerá sus pequeños dedos.
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Como el arco plantar no se forma hasta los 4 años, su plantilla es plana, antibacterias y además extraíble para poder airear el calzado cuanto sea necesario.
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Incluye un estabilizador externo lateral para evitar desplazamientos del pie, que no oprime el talón y sí permite al niño mantener la estabilidad que ha ido aprendiendo hasta ahora.
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En la zona trasera Biomecanics opta por un hendido en "U" que deja libre el tendón de Aquiles al gatear para evitar presiones.
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Los bordes son acolchados y las costuras del interior aplanadas para evitar rozaduras.
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El material utilizado es transpirable, cumpliendo así el compromiso de evitar infecciones por humedad y libre de tóxicos.
La segunda línea de calzado infantil que desarrolla Biomecanics es Bioevolution, pensada para toda la etapa de maduración de la marcha.
Este calzado, además de mantener todos los elementos aprovechables de la línea anterior, también añade modificaciones pensadas para las nuevas necesidades del crecimiento del pie.
Por ejemplo, en esta etapa el crecimiento se produce de forma rápida, pero no constante, así que hay que estar preparado para su evolución.
Cada talla requiere una horma, por tanto es importante que la horma se adapte al pie no solo a lo largo, sino también a lo ancho.
Por eso, en opiniones de Biomecanics lo ideal es su horma evolutiva, que se adapta a las condiciones que va requiriendo el pie del pequeño.
Además, este calzado infantil tiene las siguientes características:
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Cuenta con una suela más gruesa, de entre 5 a 10 mm.
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Las punteras ahora incorporan un refuerzo ligeramente rígido, para proteger mejor los dedos.
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Se sigue recomendando en esta etapa una caña blanda y elástica, con el borde acolchado.
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Como en la línea anterior, el material utilizado en los acabados es transpirable para evitar infecciones por humedad y libre de tóxicos.
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Tampoco tiene bordes o costuras que puedan causarle ninguna molestia.
(CN-04)
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