Jaime Díaz, alcalde de Ruente, ha calificado la atracción de este enclave natural de “espectacular”, con una afluencia “exagerada”. Aunque no hay ningún tipo de control para los excursionistas, el regidor municipal indicó que estos singulares cursos de agua, junto con el monte Ucieda y el propio pueblo de Ruente han sido objeto de gran atracción.
Durante el recorrido se echa en falta el acondicionamiento de algunos puntos para hacer más fácil el tránsito, especialmente para aquellas familias que hacen el recorrido con niños, pero, el alcalde indicó que no está previstos trabajos adiciones, ni una mayor promoción. Lo que si hará el Ayuntamiento reponer algunos puntos en los primeros tramos de la pista que parte desde la localidad de Barcenillas.
La promoción de las cascadas se facilita en la Oficina de Turismo de Ruente y en los folletos publicitarios de la Mancomunidad Saja-Nansa y de la Reserva de Saja.
Nuestra más reciente visita a este sendero cabuérnigo la hicimos el último día del mes de octubre y pudimos comprobar la gran cantidad de gente que transitaba por allí para disfrutar de la naturaleza.
Te presento el sendero de las Cascadas de Lamiña en la ruta Barcenillas-Cascadas de Lamiña con los puntos de interés en los que te puedes parar a contemplar esta maravilla de la naturaleza hecha realidad.
A las Cascadas de Lamiña o Cascadas de Úrsula, como las conocen los lugareños, se puede llegar por dos trayecto. Uno partiendo desde el pueblo de Lamiña y otro desde la localidad de Barcenillas. Nosotros escogimos la primera de las opciones. Si haces un alto y accedes por las escaleras exteriores de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, veremos unas magníficas con hileras de casas llanas, típicas de la arquitectura montañesa. Unos metros más arriba de la iglesia nos encontramos con la Casa del Madero, edificación emblemática donde se celebraban los concejos. Es una casa prototípica de balcón corrido con solana del siglo XVIII. Su nombre hace honor a la adaptación del tronco de un árbol que ocupa todo el pie de la fachada a modo de banco.
Siguiendo el camino nos encontramos con la Fuente de Arriba, con antigüedad del siglo X. El trayecto es muy practicable y en otoño las hojas caídas conforman una alfombra natural bajo nuestros pies.
SAN FRUCTUOSO
Más adelante, a un kilómetro aproximadamente, observamos una pradería cerrada a nuestra izquierda, donde se encuentra la ermita de San Fructuoso, de estilo barroco del siglo XVIII, asentada sobre un monasterio alto medieval. En ella hay un sarcófago de la Edad Media, que en tiempos fue utilizado como bebedero para el ganado en la Fuente de Arriba.
Mientras se camina se observa un entorno natural de extraordinaria belleza, con praderías y arbolados, atravesado por el arroyo Barcenillas. A resaltar los cierres de piedra de las fincas.
Finalmente, prosiguiendo la marcha llegamos a un paso canadiense, encontramos un cartel informativo con las recomendaciones de la ruta de las cascadas como no dejar basura, no encender fuego, no invadir fincas privadas y mostrar el máximo respecto a la flora y fauna.
Ahora es donde comienza una ruta un poco más dificultosa, el camino es bastante pedregoso, cubierto por musgo y líquenes que lo hacen bastante resbaladizo. Para llegar a la zona de las cascadas cruza la ribera del arroyo de Barcenillas y desplázate hacia la izquierda en ascenso hasta que vislumbres un puente de madera.
Por ello es recomendable llevar calzado apropiado y apoyarse algún palo o bastón. Nos preparamos para disfrutar de un día de senderismo por un bosque cántabro que tiene como recompensa estas obras de la Naturaleza.
La primera cascada se divide en varios saltos de agua. Apreciarás como la vegetación engulle a los senderos y al arroyo. Siguiendo el curso del río y atravesándole en varias ocasiones veremos los otros tres saltos de agua espectaculares.
Seguimos una pequeña pendiente rocosa y cruzamos de nuevo otro caudal, este es el arroyo Moscadoiro. A continuación, aparece la segunda cascada, esta vez, nos encontramos ante un grandioso salto de agua.
Ahora, y tras quedarnos embelesados por este precioso entorno natural, subimos unas pequeñas escaleras de madera. Seguidamente, hacia nuestra derecha aparece la tercera cascada. Otro bellísimo salto de agua con abundante caudal. Finalmente, llegamos a la última y cuarta cascada
Ni que decir tiene, que esta época es cuando las cascadas están con abundante agua, lo que las confiere una mayor belleza que en los meses de verano.
Regresamos por una fuerte pendiente hasta el camino superior que nos conducirá hasta el paso canadiense, donde iniciamos el sendero.
Las características principales de la ruta son: Dificultad: Baja. Salvo algunos pequeños tramos con pendientes de dificultad media. Esta dificultad se verá sobre todo en los pequeños ascensos pedregosos en el entorno de las cascadas; Distancia: 7 km de ruta; Duración: Aproximadamente 3 horas; y Desnivel: 250 metros acumulado.
BARCENILLAS
Otra opción es iniciar el camino en el pueblo de Barcenillas , en el punto en que la ruta aparece señalizada con paneles. Después de contemplar el magnífico conjunto arquitectónico, seguiremos por la pista principal que nos conduce de forma paralela al arroyo. Discurrimos entre prados y bosque de ribera, en el que abundan los avellanos, castaños y servales, para llegar en unos 2,5 kilómetros a un cruce con el camino de Lamiña. Seguiremos hasta las cascadas por este sendero.
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