Adicción al móvil: ¿cuáles son los síntomas de la nomofobia?
La persona que padece nomofobia, reconoce que se siente desconectado, aislado del mundo, cuando no está cerca del móvil. Una sensación profunda de temor llega a invadir su cuerpo, al sentirse incapaz de comunicarse y enterarse de lo que está pasando en su entorno.
Las redes sociales, son uno de los elementos más comunes que conducen a este padecimiento, pues es aquí donde han desarrollado gran parte de su identidad, la cual se ve truncada cuando se perciben desconectados del mundo.
La nomofobia y los casinos online
Hoy en día, mucha gente ha llegado a generar nomofobia a partir de las apuestas en línea; y es que, por ejemplo, a través de plataformas como Juegos Palacio donde se encuentran juegos de dinero, la posibilidad de acceder desde el móvil a juegos de casino es bastante fácil e incluso incentivada. Aunque puede ser un pasatiempo atractivo y sano mientras se maneje con precaución, el problema es cuando se pierden los límites, cayendo en el exceso y la ludopatía.
En estos casos, puede ser aún más riesgoso, pues no solo sufrirás los síntomas físicos de la nomofobia, sino que incluso puedes poner en grave riesgo tu estabilidad económica, laboral o familiar. Hay gente que ha malgastado enormes cantidades de dinero, intentando recuperar una mala racha, y aunque hoy en día existen sistemas de ayuda y control, es importante realmente tomarlos en cuenta, para no dejar caer tu vida en excesos.
Cómo afecta la nomofobia
El dolor de cabeza y la ansiedad, son algunos de los primeros síntomas de la nomofobia. La persona puede llegar a sentirse intranquila, fastidiada, sin capacidad para poder concentrarse y continuar su vida normal.
De acuerdo a estudios, como el realizado por la Oficina de Correos del Reino Unido, el estrés que produce el desprendimiento del móvil en las personas con nomofobia, puede ser equiparable al que puede llegar a sentir una persona el día previo a su boda. Es decir, un nivel enorme de nervios y ansiedad, que puede ser capaz de evitar que la persona que lo padece continúe con su día a día.
Cuando el desapego al móvil se extiende por más tiempo, los síntomas pueden agudizarse; también se reportan afecciones físicas como dolores de estómago, producto de la ansiedad constante. Aunque también es común que surjan inquietudes psicológicas, como los pensamientos obsesivos, que de igual forma son otro indicio de que se puede estar en un grado avanzado de nomofobia.
En los casos más graves, se pueden presentar también taquicardias; es decir, llegar a poner en riesgo la vida misma, por la -falsa- necesidad de estar pegado a un dispositivo electrónico conectado con el mundo.
Medidas paliativas
Es por esto que los expertos recomiendan abordar estos temas desde los más jóvenes, que son los más propensos a este tipo de padecimientos. El hecho de delinear, los usos positivos, de los aspectos obsesivos y patológicos, es importante para no perder la noción de realidad. Y aunque en este sentido, la familia es el primer apoyo, también existen alternativas de orientación profesional, para evitar que este tipo de trastornos escalen a cuestiones más graves.
Algunas de las medidas que los expertos recomiendan:
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Controle el uso del móvil de sus hijos desde temprana edad: si su hijo tiene acceso, establezca horarios y reglas.
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Si se trata de un adulto, trate de establecer una hora límite de la noche para empezar a despegarse del móvil.
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A primera hora de la mañana trate de no revisar su móvil como primer hábito del día. Desayune, haga ejercicio o dúchese antes de coger su móvil.
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Analice cuáles son las cosas que más le captan tiempo en el móvil: juegos en línea, redes sociales, chat, etc.
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