"Paris es uno de los lugares donde más veces expuse”, declara Alberto Reguera. “Precisamente, el galerista que va a exponer mi obra de nuevo, Olivier Nouvellet, viene haciéndolo desde comienzos de los años 90. Por eso se nos ocurrió realizar a ambos una pequeña síntesis de lo últimos quince años, teniendo como hilo conductor el pigmento amarillo. Y por ello en esta muestra se intercalarán diversos periodos y vertientes, como son la fotografía, la pintura plana de paisaje abstracto, o los formatos tridimensionales”
“Es evidente que el amarillo nos conduce hacia conceptos como la luminosidad cegadora, reconstruida en el cuadro a través de los pigmentos amarillos de cromo, o los de cadmio, que tienen la doble función de absorber y despedir luz. Cuando la absorben, conducen nuestra mirada hacia el interior del cuadro, generando así mayor profundidad visual, mayor lejanía óptica, y sin la necesidad de trazar un horizonte, aunque se vislumbre”
“Pero en esta individual parisina, también están muy presentes los pigmentos flotantes que van trazando estelas, y escenarios celestes”.
“Todo ello nos hace recordar los fondos amarillentos de la pintura italiana, o aquellos de algunos románticos y de tantos paisajistas que utilizaron el amarillo como arma de transición entre el lado terrestre del paisaje y los celajes que acaban convirtiéndose en lo alto del cuadro en resplandores blancos y azules”.
“Siempre me encantó reconstruir en el lienzo, el resplandor, los fogonazos lumínicos que a veces encontramos en la naturaleza. El hecho de pintar de manera abstracta los rayos solares que filtra la luz, gracias a un sutil velo de pigmento que pertenece a la capa final del cuadro “
La galería Olivier Nouvellet está situada en la emblemática Rue de Seine, y en su espacio han expuesto grandes artistas. Esta muestra es la primera de una serie que se realizará en esta galería, inspirada en los elementos estéticos que el amarillo nos sugiere.
Gracias a Nouvellet, la obra de Alberto Reguera está presente en colecciones francesas destacables, como la de Jacques Gairard en Lyon, Cynorrhodon-FALDAC, o la de Ph. Delaunay.