El movimiento 15M de León ocupa un edificio del Obispado para crear "La Casa de los Sueños"

Integrantes del movimiento 15M de León han ocupado esta madrugada un edificio propiedad del Obispado, ubicado en el número 6 de la calle Dámaso Merino, donde pretenden instalar un "centro social", al que ya han bautizado como "La Casa de los Sueños".

La decisión se tomó en el transcurso de la asamblea que se celebró ayer tras una cacerolada en la céntrica plaza de Botines de la capital leonesa, uno de los actos con los que han conmemorado el año que ha cumplido este movimiento ciudadano de los "indignados".

Según ha explicado el 15M en un comunicado, de esta forma se pretende dar continuidad a las actividades y talleres que desarrollaron durante tres meses en el llamado Laboratorio Social que constituyeron en el Laboratorio Pecuario, un edificio abandonado propiedad de la Junta de Castilla y León, del que fueron desalojados.

El vicario general y el vicario de Asuntos Económicos del Obispado de León han mantenido un encuentro con los representantes del 15M para analizar la situación, aunque fuentes de la Diócesis han mostrado su "sorpresa y disgusto" ante una situación que se ha generado "sin comerlo ni beberlo".

El 15M de León ha elegido este edificio porque, a su juicio, "la Iglesia disfruta" de una exención del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) "en todo su patrimonio", lo que "priva" al Estado de "numerosos ingresos, que podían dedicarse a paliar el déficit presupuestario", según recoge el comunicado.

El movimiento ha señalado que el inmueble, propiedad del Obispado de León, se oferta en alquiler, "en estos tiempos de crisis", "por la nada desdeñable cantidad" de 5.000 euros mensuales, por lo que "cansados de que llueva" sobre "sus cabezas", ha decidido su ocupación para "experimentar formas de organización social alternativas".

Los integrantes del 15M leonés han manifestado su "voluntad de diálogo" con los propietarios e incluso se han mostrado "dispuestos a abandonar si hay garantías de que el dinero obtenido con el alquiler va realmente a programas de apoyo social" de la Iglesia, que se controlaría a través de una "asamblea ciudadana".