“La Hora Blanca del Turismo y la Gastronomía” desde La Casa de la Rioja

También pudimos hablar  con José Cabera,  gerente de la Almazara Madrileña Aceites de Oliva de Carabaña, productores de un genuino aceite de oliva de Madrid y que está considerado dentro de los mejores aceites del mudo y luego, en un viaje virtual conseguido por las nuevas tecnologías, “viajamos” hasta Zamora para encontrarnos con Luis Martín, el gerente de Queserías Ilbesa, que ha sido recientemente premiada en Nueva York como productora de uno de los mejores quesos del mundo y de allí, -esta vez sí en un viaje de “cuerpo presente-, nos acercamos a un trocito de Cádiz en Madrid, llamado precisamente en honor a la tierra de donde procede, LA GADITANA, un “peaso de Cai” en Madrid donde pueden degustarse las especialidades culinarias  más representativas de aquella tierra tales como los “pescaítos fritos” o las conocidas “ortiguillas” y otros platos que han hecho de la cocina gaditana, una de las mejores de la región andaluza y de España.

Almazara Madrileña Aceites de Oliva de Carabaña: Un galardonado aceite madrileño

Además de la Feria de San Isidro, la Cibeles, los museos de El Prado, el Reina Sofía, el Thyssen y su rica gastronomía, los madrileños tienen además un aceite de oliva extra que ha recibido, recientemente, el “Premio a la Joven Iniciativa Empresarial” por su gran calidad.
El olivar de referencia, con árboles centenarios, se encuentra en el sureste de la comunidad, concretamente de la Comarca de las Vegas, al lado del río Tajuña; allí fueron plantados en hileras e intercalando entre ellos tres y cuatro viñas. Pasaron los años, desaparecieron los viñedos y las raíces de los olivos se apropiaron del espacio con el consiguiente aumento de nutrientes. Actualmente estos árboles de variedades cornicabra, manzanilla, gordal y carrasqueña poseen una espléndida planta y sus seleccionados frutos son tratados, con mimo, en almazaras por procedimientos exclusivamente mecánicos.

Vega Carabaña produce tres aceites “La Latita de Madrid”, “Peque Oliva” y “Premium Edición Limitada”.
El aceite “La Latita de Madrid” elaborado a partir de la variedad cornicabra ofrece tonos frutados medio picante, con un ligero recuerdo a hojas verdes y almendra. Es usado en algunas de las cocinas de más reconocido prestigio a nivel mundial como el restaurante Martín Berasategui en Lasarte-Oria. En definitiva un aceite de oliva con gran personalidad, que realza el sabor en ensaladas o platos de carne y es fundamental en la elaboración de los platos típicos madrileños como son los callos o el cocido.
“Peque Oliva”, el primer Aceite de Oliva Virgen Extra especialmente elaborado para alimentación infantil, contiene vitaminas A, D, K y E, que favorecen el desarrollo físico e intelectual durante el crecimiento, además de ser una fuente rica de antioxidantes y antiinflamatorio que evita el riesgo de afecciones cardiacas en la etapa adulta. El secreto de Peque Oliva reside en su elevado índice de ácido oleico. Este ácido graso ayuda a prevenir una de las enfermedades más comunes entre los más pequeños, el colesterol infantil. Regula, por otro lado, las funciones digestivas protegiendo el estómago, normalizando la movilidad intestinal y el descanso del bebé.
Posee un color dorado brillante y transparente con aromas frutales y sabor suave, equilibrado, delicado con tonos frutados que recuerdan a la manzana e hierba recién cortada. Está envasado en una policromada lata con dibujos infantiles diseñada especialmente para la seguridad del niño, de forma que se evita la clásica botella y su posible rotura; impide a su vez el paso de la luz y del aire, favoreciendo su conservación.
Por último Vega Carabaña Premium Edición limitada, es un aceite de alta expresión y producción de tan solo 6.500 litros. Elaborado tras un coupage de aceitunas cornicabra, manzanilla, gordal y carrasqueña aporta una gran intensidad de matices florales y frutales que redunda en exitosos platos tanto creativos como tradicionales.

Finca La Estacada

No es un lugar de oración para rendir culto al dios Baco sino una nueva bodega de nuestro tiempo, ubicada en el Km 103 de la N-400 en Tarancón, Cuenca.
La bodega se adapta a la viña que la circunda, integrándose en ella como el ‘château’ en el ‘cru’, al tiempo que se adapta al paisaje con su arquitectura de ladrillo mudéjar típicamente manchega. La edificación se abre al norte, dejando delante de la fachada un gran espacio ajardinado como un oasis de frescor y sosiego, que contrasta con el centelleo del acero de las tinas a cielo abierto, tal y como aparecen en las bodegas californianas. 
Todo este paisaje de obra humana es fruto de la ilusión de la familia Cantarero Rodríguez, apellido curtido en diferentes aventuras vitivinícolas y con gran arraigo en estas tierras conquenses. La filosofía con la que han creado la bodega es la de apostar por revelar el perfil de calidad que poseen los vinos de estas tierras sin que el consumidor tenga que pagar un precio mas allá de lo razonable.

Hotel

La entrada al HOTEL LA ESTACADA se hace desde los amplios jardines  —en los que destacan los olivos centenarios—, que culminan en una explanada presidida por una fuente que otorga más frescor si cabe a todo el conjunto.  Estos dan paso al porche y de aquí al patio acristalado, en el que se sitúa la recepción.
El hotel dispone de 25 habitaciones, de las cuales 3 son suites. Todas ellas están equipadas con todos los medios necesarios para reuniones de empresa y de trabajo, y con todos los lujos deseados para pasar un tranquilo fin de semana en familia o en pareja.
Todo el HOTEL, al igual que el resto del complejo de LA ESTACADA  tiene acceso directo al viñedo, de cuyas vistas se puede disfrutar desde todas las habitaciones y zonas comunes, así como a la bodega y al restaurante.

La firma quesera benaventana Ilbesa

La firma quesera benaventana Ilbesa  se ha alzado con un nuevo triunfo en el World Championship Cheese Contest, celebrado es Wisconsin (Estados Unidos), una cita en la que compiten quesos de todo el mundo. En la edición de 2010, Ilbesa ha recibido el premio al mejor queso del mundo en la categoría de oveja curados, mejorando la plata obtenida en la edición anterior.

Esta edición ha reunido a más de 2.300 participantes de 20 países en sus diferentes categorías, lo que le convierte en el mayor concurso de quesos del mundo y, por tanto, el más competitivo.

Con esta nueva condecoración, Ilbesa se convierte en una de las queserías más premiadas del país. Sus quesos, DM, Esquila y Fundador, han sido galardonados repetidamente en todos los grandes certámenes nacionales. De hecho, el de oveja DM Añejo es el vigente ganador de los prestigiosos premios Cincho.