Nuevas Añadas de Pago de Capellanes

En ese encuentro se cataron las añadas 98, 99, 2003, 2004, 2005, 2006 y 2009 del tinto - buque insignia de la bodega -, que se elabora con uvas procedente del viñedo homónimo de Pago de los Capellanes de la variedad Tinto Fino 100% (porque a pesar de que la D.O. permite otras castas la bodega solo cultiva y elabora con Tinto Fino, que es la versión del Tempranillo ribereño). El original nombre de Parcela El Picón, se debe, a que el dibujo perimetral del referido viñedo, contemplado a vista de pájaro, asemeja el pico de un ave. De manera que no podía comenzar este escrito sin hacer memoria de aquella experiencia enológica imborrable. Pero ahora les comentaré otros vinos de la casa, que sigue el patrón de elaboraciones de calidad a que nos tiene acostumbrados la bodega burgalesa de Pedrosa de Duero. Con Tinto Fino, hace Pago de los Capellanes, Parcela El Picón y Parcela El Nogal - sus elaboraciones Premium -, también elabora un Reserva y un Crianza, que son de lo mejor de Ribera del Duero, además de un roble muy frutal y goloso.

Recientemente han salido al mercado las añadas del 2010 de Parcela El Picón y Parcela de El Nogal. Probé ambos vinos en Madrid Fusión 2015 en compañía de Paco Rodero: los dos excelentes, al igual que los Reserva y Crianza del 2011, que están siendo muy valorados por la critica especializada. La observancia de practicas viticultoras cuidadosas y personalizadas en sus diferentes parcelas, con el resultado de producciones cortas y seleccionadas, son el leit motiv de la Bodega Pago de los Capellanes.

La crianza de sus vinos se realiza en conos y barricas hechos con roble francés nuevo de distintas procedencias. (Las duelas de estas maderas han secado al aire libre por espacio de 24 a 60 meses). Una vez concluida la crianza en robley los ensamblajes, los vinos se embotellan sin clarificar ni filtrar, para posteriormente pasar a dormir largo tiempo en botellero antes de salir al mercado.