Se incorporó al proyecto el ingeniero técnico agrícola José Manuel Urricelqui, que desde el inicio se encargó de planificar, supervisar la plantación y las labores agrícolas de los diversos viñedos que  a día de hoy alcanzan las 200 hectáreas. Cuarenta y cuatro Ha de viñas son de variedades blancas -mayoritariamente de Chardonnay -, algo menos de  Viura y el resto de Moscatel. De las tintas hay plantadas ciento cincuenta y seis Ha. Setenta son de nuestra Tempranillo; la misma cantidad que suman las variedades bordelesas Cabernet Sauvignon, y Merlot… La joya de la corona de Nekeas (auténtica reliquia), son las 16 hectáreas de viñedo de formidables Garnachas. Algunas de ellas próximas a cumplir un siglo de edad.

Desde hace algún tiempo mi amigo José Luis Hilera Hilera, colabora con Nekeas. Años atrás fue ‘alma mater’  y responsable de la gerencia en una importante bodega de Rioja Alavesa. Es buen conocedor del complicado mercado del vino nacional, y sabe de lo que habla cuando mecomenta maravillas de los nuevos vinos de la bodega navarra y de su enóloga Concha Vecino (Hace tiempo que la conozco por sus obras, en especial por una elaboración suya,  un Chardonnay Allier de Nekeas). Esta enóloga conoce sus viñedos como la palma de su mano y propone el concepto ‘Una Viña un Vino’, para que cepa y terruño potencien su máxima expresividad. Su pasión por los vinos diferenciados y con personalidad es una cualidad  muy  apreciada en países de tradición consumidora… y la consecuencia de que una parte importante de los ‘nekeas’ marchen a la exportación. (Debo de confesarles que no es común, que elaboraciones de bodegas con una inicial estructura cooperativista, alcancen los niveles de calidad conseguidos por Concha Vecino en Nekeas, y Jesús Astrain de Bodegas Pirineos, en Somontano).

Tres son las referencias que les comento. Corresponden a un rosado del 2011, y dos tintos de la añada del 2010. ¡Los tres son monovarietales de Garnacha! El rosado es un clásico navarro bien hecho. Los dos tintos, con crianza en madera, van a rebatir conceptos trasnochados sobre esta casta, tan poco apreciada antaño para este tipo de vinos. (De todos modos, creo que las dudas y prejuicios sobre el particular, hace tiempo que los ha resuelto Álvaro Palacios).

Rosado Garnacha 2011

Muy…muy navarro. Como antaño se hacían los mejores rosados en esta DO, que todavía hoy en día, son referencia en este tipología de vinos. La maduración lenta de las uvas de Garnacha le confiere a este rosado una gran complejidad aromática debido a la ubicación del viñedo, situado más al norte que ningún otro en España. Bonito color, y  aromas donde destaca la fruta roja madura. Tiene un trago muy fácil, es refrescante y sabroso.

Cepa x Cepa Garnacha 2010

Su nombre es debido al injertado que se hizo en otras cepas de los mejores clones de Garnacha - se buscaron cepa por  cepa, las mejores vides de Garnacha vieja-, con que se elabora el vino tinto El Chaparral de Vega Sindoa (del que les hablaré más adelante).

Debido a la juventud de estas Garnachas injertadas, la  primera elaboración, tuvo que reforzarse con un porcentaje de Tempranillo de más edad para aportarle estructura, pero en las siguientes añadas la evolución del viñedo hizo innecesario el ensamblaje varietal. Cepa x Cepa es un tinto de Garnacha que ha hecho la fermentación maloláctica en roble francés, permaneciendo en crianza por espacio de tres meses en la misma madera. Un estupendo vino, ‘hijo de un dios mayor’ que son sus ancestros de El Chaparral de Vega Sindoa.

EL CHAPARRAL de Vega Sindoa Garnacha 2010

Es la elaboración Premium de la ‘casa’, que solo está disponible en añadas muy buenas. Un vino tinto exclusivo, de elaboración muy cuidada. Procede de distintas parcelas de las Garnachas septuagenarias más septentrionales de la Península Ibérica, que tienen rendimientos muy bajos debido a su edad. . El primer vino tinto El Chaparral se hizo en 1997 cuando las viñas de Garnacha estaban a punto de desaparecer. Las cepas fueron milagrosamente salvadas de ser arrancadas, como se hizo tiempo atrás en otros viñedos veteranos del Valle de Nekeas. El Chaparral de Vega Sindoa es un monovarietal de ensamblaje, de una selección de uvas de las distintas parcelas de Garnacha vieja dondecepa y terruño han ofrecido la máxima expresión varietal en los procesosde vinificación.  Ha realizado la segunda fermentación (malolática), en roble francés de primer año, permaneciendo por espacio de seis meses en el mismo roble. Resulta un vino con una gran personalidad y una buena estructura, con aromas intensos de fruta roja muy madura. En boca es frutoso, destacando suaves matices minerales. Los taninos son golosos y la madera queda bien integrada. Es un formidable vino al que auguro una buena evolución los próximos años.