En diciembre de 2009, se comenzó a preparar la VI edición del mencionado Festival encargando su organización, como en años anteriores, de la Fundación Lumière. Tras numerosas fricciones en el seno del Patronato Municipal del Cine y, muy especialmente, con los representantes del Ayuntamiento de La Solana, este organismo (con miembros tanto del ayuntamiento, como de la D.O. Mancha en mayor proporción además de la propia Fundación) decide prescindir de los servicios de la entidad organizadora. Ésta le reclama entonces, al principio de manera amistosa, la cuantía de los trabajos realizados así como la deuda del año anterior reconocida en la memoria presupuestaria realizada por el técnico municipal competente.
Tras no recibir respuesta, la Fundación Lumière se dirige al Ayuntamiento de La Solana varias veces manteniendo el tono conciliador, terminando por remitir un burofax al que tampoco se responde, lo que le ha llevado, de acuerdo al consejo de su Gabinete Jurídico y el contenido del propio documento remitido, a plantear la demanda de cantidad ante la Justicia.
Además de demandar esta cantidad, no descarta pedir daños y perjuicios ante la clara apropiación de la estructura, premios, ideas… del Festival de Cine Europeo Vinos de Castilla La Mancha que realizó la Corporación municipal a la hora de plantear un evento similar, de nueva creación, pero sin especificarlo claramente, con la confusión que eso ha generado en muchos sectores vinculados con el anterior evento y que enturbia el nombre del Festival original y dificulta su futura labor.
Ruptura definitiva
Por esos motivos, la Fundación Lumière ha anunciado también su abandono del actual Patronato Municipal del Cine en el que todavía constaba si bien, no tenía trascendencia al no haber podido acudir a las últimas reuniones y no habérsele facilitado las actas de las mismas pese a las peticiones expresas de su envío. Ante estas circunstancias y por todo lo anterior, se ha tomado la decisión anunciada.