El secretario de Organización del PSOE y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha denunciado este domingo en un acto en Valencia que la trama Kitchen, que investiga el uso de fondos reservados para sustraer pruebas judiciales, "es un caso siniestro, que habilita o inhabilita a alguien para gobernar". La trama, en fase de investigación, supone "un ataque al Estado de derecho profundo" por "el uso de fondos para tareas parapoliciales" que buscaban "obstruir la tarea del estado de derecho, del poder judicial", impidiendo la investigación al partido que gobernaba.
Ábalos cerca a Casado y le exige responder sobre sus vínculos con María Dolores de Cospedal, imputada esta semana, con quién pactó su presidencia del partido tras las primarias. "¿Cuánto le deben? ¿Por qué la protejen?¿Qué información tiene?", ha cuestionado el ministro.
"Me llama la atención que se nos acuse de ilegales, de no respetar la Constitución, un partido que ahora mismo no sabe qué hacer con la imputación de María Dolores de Cospedal", ha insistido, acusando a la derecha de haber sido desleal con todos los Ejecutivos socialistas.
La debilidad del PP y los "desafíos independentistas"
El dirigente valenciano ha centrado parte de su intervención en defender a su formación de los ataques de los populares, que enarbolan una supuesta ruptura del Estado, incluso una traición, ante cualquier acercamiento del Gobierno central a la Generalitat de Catalunya. Ábalos ha recordado que "con el Gobierno del PP se produjo el referéndum ilegal y la declaración de independencia. Eso era el resultado de la ausencia de política, de la indolencia, de la época de la hamaca y del puro, de pusilánimes".
Con el Partido Popula en una situación "de debilidad", ha insistido, es cuando se producen "los desafíos del independentismo", como el referéndum o la declaración de independencia, cuyas consecuencia ha heredado el Ejecutivo de Sánchez.
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