Carlos Acuña en el Morocco

Si el amigo lector busca la página Web del citado local, que fue inaugurado a principios de los cincuenta del pasado siglo, podrá acceder no solamente a información, sino también a fotografías donde se pueden a ver muy jóvenes, al bailarín Antonio Gades, a la actriz y cantante Carmen Sevilla, a los actores Fernando Fernán Gómez y José Luis López Vázquez, y a Carlos Acuña.

Este acababa de instalarse en Madrid. Permaneció en España  hasta el año 1978 en que regresó a la Argentina, para volver en 1990 y actuar en espectáculos y televisión. Muchos recordarán su paso por el restaurante “La Carreta” de la calle Barbieri en Madrid. Después de Carlos Gardel, es tal vez el nombre más popular en cuanto a cantantes de tangos en estas tierras. Se lo ganó a pulso y como gran vocalista, seductor y de buena planta, obtuvo merecidamente el favor del público. Hombre muy relacionado a Juan Domingo Perón, era uno de los habituales de la Quinta Puerta de Hierro cuando el general vivía exilado en Madrid.. Solía decir que cuando alguien quería hablar con Perón, él era el indicado para lograr la cita.

Muchos dicen que fue su auténtico Delegado. Nació en Buenos Aires el 4 de noviembre de 1915 y falleció en la capital argentina el 19 de febrero de 1999.  Al principio actuó con el seudónimo de Carlos Dillón, hasta que un amigo de profesión carnicero, le dijo que un cantor de tangos no podía llevar un apellido inglés. El amigo se llamaba Acuña. Ese fue el suyo artístico desde entonces. Como solista actuó con varios acompañantes y en el año 1941 dio el primer gran paso, incorporándose a la orquesta dirigida por el maestro Carlos Di Sarli. Tuvo que compartir micrófono con Roberto Rufino, uno de los mejores vocalistas de tango. 

Graba varios temas, se va con la agrupación de Rodolfo Biagi, vuelve a su condición de solista acompañado por los guitarristas Alfredo y Antonio Parisi, Orlando y Calabró y presentado por su gran amigo Celedonio Esteban Flores, el gran poeta popular, autor entre otras de la letra de “Mano a Mano”.  El 28 de julio de 1947 muerte el negro “Cele” , hecho traumático para Acuña. Se va a Uruguay, actúa en radio, sigue grabando hasta que da el otro gran salto: ingresa en la orquesta de Mariano Mores, corría el año 1956.

En el sesenta realiza una gira con Mores por México, al año siguiente integrará una embajada de tangos para participar en Italia en el Festival de la Canción Argentina. Lo acompañaban otros grandes: los cantantes Argentino Ledesma, Chola Luna , Antonio Maida y el pianista Miguel Nijensohn. Luego del retorno a Buenos Aires, viaja a Berlín , para radicarse inmediatamente en España. Es autor de la música del tango “Un boliche”, con letra de Tito Cabano, “Al poeta del suburbio”, dedicado a Celedonio Flores, aquí con Juan Paradiso; “Che Madrid” y “Ramona Barcelona” con Cátulo Castillo y varios más. Junto a otros grandes, Carlos Acuña, cuyo verdadero nombre era Carlos Ernesto Di Loreto, dignificó e hizo más importante la difusión de la música del Río de la Plata en Europa.