El holocausto marcó un antes y un después en la historia, aseguró el Canciller chileno

"Aquel día 27 de enero de 1945, fue liberado el mayor campo de exterminio nazi, Auschwitz-Birkenau, símbolo de la industria del mal y del horror", afirmó el ministro de Relaciones Exteriores, según un comunicado oficial de la Cancillería.

Agregó que, como señaló el escritor y Premio Nobel de la Paz, Elie Wiesel, sobreviviente del Holocausto "no murieron sólo los judíos, sino que murió el hombre y murió la civilización".

Ante la presencia de varias autoridades y miembros de la Comunidad Judía en Chile, Fernández añadió que "en este contexto, el Holocausto significó el exterminio sistemático de al menos seis millones de judíos y europeos.

Asimismo, "el exterminio de cientos de niños e innumerables seres humanos, tales como discapacitados, pueblos eslavos y otros, perseguidos por motivos políticos, ideológicos e incluso de orientación sexual", recalcó.

El Canciller chileno destacó que el Holocausto marca un antes y después en la historia de la humanidad, ya que "sobre las cenizas de las víctimas, emergió la Declaración Universal de los Derechos Humanos".

"Un documento fundacional de la arquitectura institucional de la sociedad moderna, que se ha construido a lo largo de estas décadas, para cuidar y supervisar internacionalmente los derechos fundamentales de las personas", apostilló.

El canciller Fernández recordó que Hernán Santa Cruz, "insigne diplomático chileno y alto funcionario de Naciones Unidas, fue uno de los redactores de este documento fundamental para nuestras vidas".

Afirmó que "a las víctimas del Holocausto, a estos seis millones de judíos y a las otras víctimas, les debemos no solo el hecho de que se castigue penalmente el genocidio y los delitos de lesa humanidad, sino que les debemos esencialmente la legitimidad que hemos tenido todos para luchar contra las dictaduras, contra los abusos de poder, y contra las violaciones a los derechos humanos en todo el mundo".

Al término de la ceremonia, se le otorgó el galardón "Luz y Memoria" al ministro Secretario General de Gobierno, José Antonio Viera-Gallo, por su actuación en materias de ley de no discriminación, y facilitación de la libertad religiosa en Chile.