Evo Morales echa el resto para lograr la mayoría absoluta en Bolivia

Álvaro García Linera aspira de nuevo a la Vicepresidencia con Evo Morales. Mientras que al ex gobernador de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, le acompaña el ex gobernador de Pando, Leopoldo Fernández, quien se encuentra en prisión desde hace un año a la espera de un juicio que impulsa el gobierno por su presunta responsabilidad en la denominada masacre de El Porvenir, ocurrida en 2007. En esa ocasión, al menos 13 personas murieron durante un enfrentamiento entre campesinos y grupos afines a los gobiernos departamentales que exigían las autonomías, entre ellos el que dirigía Fernández.

Ahora, el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales se apropió del discurso autonómico e impulsa la aprobación de este modelo en 18 consultas que se realizarán de forma paralela a las elecciones generales. En estas consultas cinco departamentos, una región y doce municipios indígenas votarán si se incorporan al modelo autonómico. Las encuestas y los analistas anticipan una amplia victoria del «sí», ya que esta vez oficialistas y opositores respaldan el mismo objetivo.

En el caso de las generales, la disputa se centra en la meta oficialista de lograr el control absoluto del Poder Legislativo, para lo que el MAS necesita 24 senadores. Según las encuestas, ya tiene asegurados 22 escaños.

Durante toda la campaña electoral, Morales y García Linera insistieron en la necesidad de lograr este objetivo para consolidar las transformaciones que emprendieron el 22 de enero de 2006, cuando asumieron el poder con el 53,7% de respaldo popular.

En estos cuatro años, los opositores frenaron la aprobación de un gran número de leyes propuestas por el oficialismo y se negaron a autorizar juicios de responsabilidades contra autoridades del Poder Judicial, por considerar que formaban parte de una estrategia para neutralizar ese poder ante eventuales demandas contra las políticas del Gobierno.

Reyes Villa señaló un día antes del cierre de la campaña electoral, que el país se encuentra ante la disyuntiva de elegir entre la continuidad de un gobierno antidemocrático o uno que «recupere la libertad y la dignidad de los bolivianos». De esta manera hizo alusión a la estrecha relación que existe entre Morales y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

Que sigan presos...

El pasado martes, el gobernante indígena, de 50 años, anunció que una vez sea ratificado en el cargo, cambiaría el sistema judicial para que Reyes Villa y Fernández se queden en la cárcel. Reyes Villa se enfrenta a dos procesos por casos de corrupción, impulsados por la gobernación oficialista de Cochabamba.

Nunca antes tantos bolivianos -5.138.583- se habían inscrito para participar en un proceso electoral, que por primera vez en la historia del país se realizará con el uso de un padrón biométrico -para el que no es obligatorio el certificado de nacimiento- y con la apertura del voto a los emigrantes