El caso es que los deportes, el desempeño deportivo, hacen a la identidad de los seres humanos. Muchos se sienten allí como no se sienten fuera de los terrenos. Eso hace que la lesión pueda ser tomada como un problema sin solución cuando, en realidad, la tiene.
Puedes leer mucha más información sobre lesiones deportivas en los principales periódicos y portales dedicados al tema, si bien lo importante es que sepas que las lesiones se superan tarde o temprano, que pueden ser padecidas por cualquiera, y que lo mejor es estar fuerte mentalmente para volver a la actividad. Si crees que todo esto es complejo, o complicado, estos tipos te serán de ayuda.
¿Cómo afrontar una lesión deportiva?
Lo primero es que confíes en tu sistema de apoyo, que puede contemplar tanto a tu entrenador personal como a tu familia, amigos, compañeros, etc. Así como tú apoyas a los demás cuando se lesionan, los demás te apoyarán a ti mientras estás recuperándote.
En segunda instancia tienes que tener expectativas reales. Diles a los médicos que te hablen con la verdad, que no te oculten nunca qué tan severa puede ser una lesión ni los plazos de recuperación. Eso te permitirá tener expectativas reales. Si luego te recuperas antes de lo previsto, mejor aún. Pero si te demoras más de lo que te dijeron para dejarte satisfecho, eso sólo te jugará en contra.
Finalmente, es fundamental que tomes la rehabilitación como una competición más. Debes estar motivado y ponerte el objetivo específico de volver tan bien como te habías ido. Es la única forma de que no decaigas en el proceso, o decaigas lo menor posible.
¿Cómo prevenir las lesiones deportivas?
La primera clave es identificar las lesiones a tiempo. Haz clic aquí para saber cómo detectar problemas con los huesos, músculos, incluso las articulaciones de tu cuerpo. Si estás sano y pretendes seguir así, es indispensable que calientes antes de cada sesión. Aumentarás así el flujo de sangre y oxígeno a los músculos, y también aumentarás la flexibilidad, la relajación y la concentración.
Además tienes que estirar para prevenir las lesiones, tanto antes como después del entrenamiento y de las competiciones. Asegúrate de usar los equipamientos correctos, si tu deporte los requiere, y presta atención a la técnica con la que juegas. Lamentablemente, muchos no son conscientes de la necesidad de dominar la técnica y eso les predispone a las lesiones.
¡Tu cuerpo habla, escúchalo! Muchas veces tenemos advertencias de posibles lesiones y las pasamos por alto porque intentamos seguir entrenando o compitiendo. Es mala idea, debes oír a tu cuerpo porque nadie sabe mejor si hay un inconveniente grave acechando. Dale la recuperación que se merece, bebe líquidos, come bien y descansa tanto como crees que haga falta.
(CN-04)