Esta solución tecnológica cobra cada vez más importancia en las empresas, sobre todo, porque facilita las tareas relacionadas con la facturación y contabilidad. Además, este software se convierte en el gran aliado en el Departamento de Recursos Humanos, donde se aminora la carga y se agiliza el trabajo diario.
Las principales características de un software ERP para pymes
En los últimos años, las empresas se han visto expuestas a muchos cambios y la transformación digital es parte de la nueva realidad. En este aspecto, hay dos factores clave para avanzar y tener más garantías de éxito: la automatización y la toma de decisiones informadas. Por dicha razón, el uso del ERP ofrece estas ventajas competitivas y permite que la digitalización se lleve a cabo de forma más rápida y efectiva.
Aunque esta herramienta tecnológica se lleva utilizando desde hace bastante tiempo en las grandes empresas, nada tiene que ver con el uso actual. De hecho, este planificador de recursos empresariales era mucho más costoso y menos accesible para los autónomos y las pymes. Hoy en día, estos programas son mucho más sencillos e intuitivos, y se adaptan a las necesidades del momento al ser personalizables.
Una vez que el empresario ha superado la barrera del entendimiento y comprende qué es un programa erp y cuál es su utilidad, ha llegado el momento de dar el siguiente paso. Está comprobado que una de las mayores dificultades a la que se enfrentan a diario algunos empresarios tiene que ver con la elección de este software. Hay un amplio abanico de opciones disponibles en el mercado, sin embargo, estas son sus principales características:
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Automatización de las tareas y los procesos de la empresa.
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Funcionamiento en tiempo real que favorece la toma de decisiones informadas.
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Agilidad de los trámites y mejora de la gestión interna.
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La interfaz suele ser cada vez más intuitiva y sencilla.
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Ahorro de tiempo y reducción de los costes empresariales.
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Se minimiza el error humano.
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Es una herramienta muy útil que evita la duplicidad de los datos.
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Personalización, flexibilidad y adaptación.
Por último, cabe señalar que antes de elegir un ERP, lo más indicado es ponerse en manos de expertos que ofrezcan una consultoría previa. Antes de implantarlo es imprescindible que se revise el modelo empresarial y su actividad con el objetivo de encontrar la alternativa más competitiva y funcional.
En definitiva, un software ERP implica un cambio de mentalidad para avanzar en la digitalización de cualquier empresa. Sin embargo, hay que utilizar la herramienta tecnológica que se ajuste a los requerimientos del momento, en este sentido, lo más apropiado es ponerse en contacto con un proveedor confiable de soluciones tecnológicas, como Cegid. Esta compañía, que es líder en el sector, ofrece Cegid Diez ERP Pyme para mejorar la eficiencia y productividad.
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