El lugar es privilegiado, enclavado en una antigua fábrica de licores, ubicada en la ciudad de Quintanar de la Orden, Avenida del IV Centenario 38, que fue propiedad de la familia de la artista y que lleva a buen puerto su esposo David Cohn.
LA OBRA EXPUESTA
Hablar de Rafa Angulo, es complicado, ya no por la forma de entender su arte, sino por la estética que encierra su quehacer artístico que va más allá de lo que sería examinar lo cotidiano, porque dicha manifestación bucea en lo más íntimo de los objetos o cosas que existen en la naturaleza. Él, con dicha representación, hace pensar y divagar al espectador, creando pasajes o paisajes imaginarios, que, cuando se observan detenidamente, se hace más visible, porque esa imagen tridimensional allí expuesta, tiene otras connotaciones que a simple vista no se extraen. Es decir; hay una relación y comunicación entre el artista y el observador de lo expuesto. Hay que ir a la intimidad del objeto para ver, pensar imaginar que sensaciones o emociones nos causa, a veces bastante conceptual, para ello es conveniente ir más allá de la mera representación.
Su obra encierra una doble interpretación, por un lado, la imagen física, por otro lo que aparece, representa o lo que podemos imaginar.
Hay un interés por la naturaleza en su intimidad.
En lo bidimensional su obra también es importante, muchas veces complementada con los objetos tridimensionales y con temas del medio ambiente y está realizada con técnicas mixtas.
INFLUENCIAS
Rafa Angulo estudió Bellas Artes en la Facultad de Cuenca, dependiente de la Universidad de Castilla-La Mancha. Quizás lo agreste del paisaje de dicha ciudad, su naturaleza, sus rocas o su paisaje, le influiría en un interés en parte por el Land Art, independientemente de la evolución y representación del artista que es inmensurable, ya que sus obras son filosofía y poética a la vez, que se visualiza combinando arquitectura y escultura en instalaciones. Los árboles que presenta, con la pátina del tiempo, sus formas desiguales, con el fondo de tinajas, crea una sucesión de imágenes, que traslada al espectador a la naturaleza, pero de una forma conceptual y de contenido. Así mismo las piedras que Angulo denomina “pietra calda” piedra caliente en castellano, es una definición muy acertada, ya que la piedra en ese estado, está viva, por la que se puede llevar a cualquier definición, bien como unidad o conjuntada, también en altura, apareciendo como gigantes de la escultura monumental, que, con sus formas, se convierte en los materiales predilectos para crear.
BREVE CURRÍCULO
Rafa Angulo es natural de Quintanar de la Orden. Su historial es amplio, aparte de lo ya expuesto, hay que decir que comenzó su formación en los talleres del pintor quintanareño, ya desaparecido Antonio Arnau (1932- 2011). Después de su paso por la facultad, amplió su formación en los talleres de la Casa Falconieri en Cerdeña y Fundación Pilar y Joan Miró en Mallorca.
Ha realizado varias exposiciones y ferias colectivas e individuales en varios puntos de la geografía nacional e internacional y su obra está presente en numerosos estamentos oficiales, al que se complementan con una decena de premios nacionales e internacionales de Pintura y Arte Gráfico.
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