En la presentación se estableció el paralelismo entre Ramón y Alexandru Tone, en su gusto por guardar papeles, recortes, billetes de transporte, cosas y objetos que llevan a su despacho y taller respectivamente, para trabajar con todo ello. Se recalcó igualmente la admiración del artista rumano por el escritor español cuando lo conoció a través de un concurso llevado a cabo por el Museo y la Semana Gastro en 2019, en la que Alexandru Tone (Rumanía, 1970) ganó el concurso con la ilustración en collage de la greguería La cucharilla despierta el café dormido que habíamos olvidado tomar.
La directora del Museo recordó que la institución guarda con gran aprecio el célebre despacho de Ramón, que regalara su esposa Luisa Sofovich, donde se muestran todos las cosas, objetos, cuadros y mobiliario, entre ellos, los biombos con recortes y papeles pegados, del escritor madrileño. Se trata del despacho que el autor tuvo en Buenos Aires, ya que el de Madrid -con sus numerosos objetos adquiridos en el Rastro- lo abandonó en manos de su portero, cuando se exilió tras la guerra civil. El despacho entró en el Museo Municipal en 2001 y se instaló en un montaje hermético acristalado en 2015.
Antes, el despacho se mostró en una exposición de Ramón Gómez de la Serna (1888-1963) en el Museo Reina Sofía, comisariada por Juan Manuel Bonet.
Silvia Alberti destacó que en los trabajos de Tone podemos ver recortes de ilustraciones, billetes de metro, cromos, dibujos, códigos de barra… todo ello trabajado con sentido plástico y humor. El artista es un recolector de materiales, que reinventa con sentido crítico y humorístico. Auténticos juegos visuales, en paralelismo a los juegos de ideas y palabras de Ramón en sus greguerías. “Alexandru es un hombre silencioso con mucho talento”, concluyó.
Isabel Vicente, la editora, recordó el encuentro y la conexión cósmica de los dos autores, Ramón y Alexandru Tone. Ambos guardan papeles y objetos en un lugar rico en presencias y ambos, con sus frases e ideas reinterpretan la realidad, a su vez reinterpretada por el primero.
Los numerosos asistentes al acto pudieron ver, además del libro, los collages de Alexandru Tone en directo, realizados en su taller instalado en San Lorenzo de El Escorial. Entre ellos el pintor y profesor Francisco López Soldado y su esposa Carmen.