22AGO22 – MADRID.- Viene de muy lejos, de estrenos teatrales a los que él asistía, pues era y es muy aficionado al teatro además de gran poeta y recitador de poesía. Pero en 1971, cuando Antonino González Morales, miembro de la directiva de ABC, el ABC verdadero, y José Luis Vázquez Dodero, leían con interés y amistad mis escritos, y “Prensa Española” publicara mi gran novela “Largo Retorno”; ambas personalidades de ABC compararon mi prosa con la de Thomas Mann, y Luis María Anson me recibió en su despacho de ABC, en Serrano.
Era entonces Subdirector del mismo. La entrevista fue amena, cordial y muy afectuosa, recuerdo que Anson, el joven Anson de entonces, movía nerviosamente los pies calzados con zapatos de magnifico cuero y tafilete con lengüeta aprisionada con cordones. Fue quizá la vez en la que estuvimos solos y frente a frente los dos más tiempo.
Han pasado muchos años, pero yo nunca lo olvidaré. Lucía el sol inefable de los principios, de la juventud, de la ambición y de los sueños, en un sistema político carente de libertades y de partidos políticos pero lleno de ilusión y de ganas de trabajar y de vivir. Así conocí a Anson, cuando los dos, él y yo, éramos aún muy jóvenes.