El libro va profusamente ilustrado y gráficos en color y blanco y negro y se acompaña de una buena bibliografía. La portad del volumen lleva un cuadro de Edward Hopper, Cape Cod Morning (1950).
Se trata de la primera Historia de la Arquitectura con este enfoque, que presenta edificios, ciudades y territorios a través de su relación con los cuatro elementos de la tradición clásica: el fuego, la tierra, el agua y el aire.
“La Tierra es como una nave espacial cuyo destino debemos regir con tiento si no queremos precipitarla a un naufragio que sería también el nuestro”, dice el primer párrafo de la introducción del libro Historia medio ambiental de la arquitectura, volumen de 422 páginas. No hay que olvidar la cita de Vitruvio: “El arte y la ciencia remediarán las molestias que produce la naturaleza”, o la de Felipe Fernández-Armesto: Toda historia es, en cierto sentido, una historia ecológica”.
El índice del libro Historia medio ambiental de la arquitectura se distribuye por los cuatro elementos clásicos citados, que a su vez se subdividen en distintos capítulos que amplían o desarrollan la actitud ante el elemento clásico.
Leyendo este libro dan ganas de suscribir esa pretensión de muchos arquitectos de que la Arquitectura es la prima donna de las Bellas Artes.