La oficina de prensa del Vaticano comunicó que el promotor de Justicia de la Ciudad del Vaticano, Gian Piero Milano, y el adjunto, Alessandro Diddi, dispusieron que la apertura de las dos tumbas se realizará el próximo 11 de julio.
"La decisión se ha tomado en el ámbito de uno de los sumarios abiertos tras la denuncia de la familia de la joven, que indicó el posible ocultamiento de su cadáver en este pequeño cementerio ubicado dentro del Estado Vaticano", añadió el comunicado.
Las operaciones se realizaran en presencia de los abogados de las partes y los familiares de Orlandi y de las personas enterradas en estas tumbas, y agentes de la Gendarmería vaticana, así como del perito Giovanni Arcudi.
A esta decisión, añade la nota, "se ha llegado después de una fase de investigación en la que el fiscal junto con la Gendarmería vaticana ha llevado a cabo estudios en profundidad destinados a reconstruir las principales etapas judiciales de este largo y doloroso y complejo caso".
El Vaticano recuerda que las autoridades investigadoras no tienen jurisdicción para indagar la desaparición de Orlandi en Italia y por ello esta iniciativa es solo para verificar la posible sepultura del cuerpo de la joven en su territorio.
Además, señala que la operación del 11 de julio es solo una primera fase, a la que seguirá la catalogación y datación de los restos y la prueba del ADN.
La abogada de la familia Orlandi, Laura Sgrò, explicó en marzo que el verano pasado recibieron una carta anónima con una foto de la tumba con la frase "busque donde indica el ángel".
Según Sgró, tras algunas investigaciones se descubrió que la tumba se abrió al menos una vez y que la datación de la estatua es diferente de la de la losa. Por ello decidieron pedir al Vaticano su apertura.
La tumba se encuentra en el cementerio teutónico, dentro de los muros vaticanos, donde una vez estuvo el llamado Circo de Nerón, lugar de martirio de muchos de los primeros cristianos, y posteriormente pasó a ser propiedad de una fundación alemana.
En este cementerio, apoyada en una de las paredes, se encuentra una estatua de un ángel que sostiene una sábana con el texto latino "Requiescat in pace" (Descanse en paz), mientras que en la lápida hay una inscripción fúnebre dedicada a la princesa Sofía y al príncipe Gustavo von Hohenlohe, quien en 1857 fue nombrado arzobispo por el papa Pío IX.
El caso Orlandi, la chica de 15 años que desapareció el 22 de junio de 1983 cuando salía de la escuela de música de San Apolinar, en el centro de Roma, sin que desde entonces haya habido noticias sobre su paradero, ha estado siempre rodeado de misterio por las varias teorías de la implicación desde hombres de la Curia vaticana, a la Banda de la Magliana (la mafia de Roma) o del atentado a Juan Pablo II a manos del turco Ali Agca.
La familia lleva años intentando encontrar pistas de lo que ocurrió y ya en 2012 pidieron una investigación cuando se encontraron restos óseos sin identificar al lado de la tumba en la basílica de San Apolinar de Enrico De Pedis, jefe de la "Banda de la Magliana", la mafia de Roma durante los años 70 y 80.
También recientemente el hallazgo de unos huesos en el sótano de la nunciatura de la Santa Sede en Roma hizo que se volviera a hablar del caso, pero finalmente se determinó que los huesos eran incluso anteriores a 1964, según la Fiscalía de Italia.