El candidato socialista lleva días repitiendo el argumento como un mantra y con frases exactas a las que arrancaron los aplausos en el mitin del día anterior. El manual de campaña de Sánchez tiene dos normas básicas: repetir que las tres derechas son solo una y no citar a Vox de manera expresa en ningún momento.
La estrategia del PSOE profundiza en la idea de que cualquier votante del PP o Ciudadanos podría serlo también de Vox. El plan se apoya en los sondeos que aseguran que la fractura en el ámbito ideológico más conservador es una de las principales ventajas electorales para el PSOE. Sánchez no parece dispuesto a desperdiciar esa baza.
"Van juntos a todos lados: se van con la pancarta a la Plaza de Colón, se van juntos a tomar vinos y juntitos se irán a la oposición", ha asegurado el candidato socialista. Según Sánchez, "nos estamos jugando si queremos avanzar o retroceder 40 años". Frente a ese riesgo, ha pedido "una gran victoria para una gran mayoría parlamentaria que traiga estabilidad". "Lo tenemos muy cerca", ha dicho.
El candidato del PSOE ha pedido "una España en la que quepamos todos frente a la España estrecha que se circunscribe a las cuatro esquinas de la Plaza de Colón".
Según Sánchez, "España necesita un Gobierno que dependa de su propia fuerza parlamentaria, un Gobierno que hable con todos pero dentro de la Constitución". En un tono triunfalista, ha asegurado que "no va a haber quien pare esta ola de ilusión".
Gonzalo Cortizo
FUENTE: eldiario.es