Es impresionante ver la velocidad con que van cayendo en lo anterior, incluso los bien educados a la antigua. Por otro lado, la gente pareciera dejar su detector de abusos e idiotez en la cama y no reconocer cuando alguien tiró la bola intencionalmente en dirección equivocada. Así es como ni cuenta se han dado, de que algún “canallo” que supuestamente apoyando la emancipación de la mujer en el terreno del lenguaje, irónicamente tal como el título del presente, echó a correr las modernas y absurdas expresiones de lenguaje inadecuado.
Quien lo hizo fue con burla y hoy debe estar muerto de la risa viendo como corrió su estupidez entre los que no parecían tan tontos.
En general, ya estamos hasta la coronilla con que líderes de opinión, incluyendo algunos respetables mandatarios del mundo usen, entre sus expresiones, ciertas frases sueltas sin ningún contenido idiomático y como si fuera correcto.
El lector, ya habrá escuchado y leído a menudo frases incoherentes, sin sentido completo (por lo tanto NO oraciones ni expresiones lingüísticas adecuadas) como las siguientes: “le anuncio a todos y todas”; “le llegará un bono a él y la que tal cosa”; “murieron los y las pasajeras”; “me dirijo a los y las mamás”; “serán atendidos por los y las azafatas”; “apoyaremos a los y las jubiladas”, etc. ¿Es que nadie escuchó, alguna vez, hablar de los neutros?
Ya tenemos demasiado de esta basura inorgánica y es mentalmente agotador. Lo más terrible es que, muchas personas (y “personos”) del habla hispánica, sienten que nos han hecho un favor de inclusión lingüística. Hoy por hoy, verdaderamente no debería haber derecho a equivocarse, seguir cualquier expresión malintencionada y ayudar a ponerla de moda sin investigar antes acerca de la fuente. La gente tiene a mano desde correctores de ortografía hasta la posición lunar del día que quieran. La RAE está a un botón y segundos de alcance. En Chile, existe el equivalente de dos teléfonos celulares por persona, contando los habitantes desde los recién nacidos (y “las recientas nacidas”) hasta los ancianitos con demencia.
Por otro lado, las mujeres que nos manifestamos por nuestros derechos, deberíamos hacerlo con los sentidos más alerta para evitar que sigan ridiculizando y haciendo caricaturas de nuestros procesos de lucha con peticiones por la igualdad. Si las malas expresiones vertidas en este artículo hubiesen nacido realmente de mujeres, serían expresiones inteligentes, que nos llevarían por ejemplo, a conseguir sueldos equivalentes frente al mismo empleo que ejecute un hombre. Serían expresiones que nos permitieran y favorecieran para que nuestros hijos nacieran bajo nuestra potestad y no tener que perseguir eternamente a los padres del sexo masculino (carentes de lo que autodenominan hombría) que un día desaparecen y dejan a sus hijos a cargo de sus ex mujeres, quienes quedando con casi todas las obligaciones legales, no tienen permiso para sacar a sus hijos del país y ni aún, para administrar los bienes de estos, aunque dichos bienes hayan sido producidos e incrementados por ellas mismas. Esto es más importante para nosotras, que el mundo continúe con discursos cacofónicos, cuyos términos erróneos difundiera algún pobrecito misógino desde su oscura cuevita. ¡Que la paz esté con él!
(Primavera bien hablada)
(*) Primavera Silva Monge es una escritora chilena, traductora de japonés, ex alumna del prestigioso Instituto Nacional de Santiago de Chile, artesana y socióloga por afición. Sus escritos los redacta referidos principalmente a los temas cotidianos imprimiéndoles una dosis de frescura y cercanía que hacen muy fácil su lectura y comprensión. Su género literario favorito es la novela y el relato o cuento corto.