La decisión de la fecha es potestad de la presidenta del Congreso, aunque lo habitual es que la discuta y acuerde con el candidato. El día 31 será la primera votación, y el día 2 de septiembre sería la segunda en caso de no salir la mayoría absoluta que se requiere en el primer intento; entonces ya bastaría con mayoría simple para que el candidato del PP saliera investido presidente. En caso de no ser elegido ningún candidato en los dos meses siguientes al debate de investidura, tendrían que celebrarse unas nuevas elecciones generales en fechas navideñas, en concreto serían el 25 de diciembre.
La comparecencia de Pastor se produce después del compromiso del candidato a presidente, Mariano Rajoy, con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, a quien, tras aceptar las condiciones, prometió que hablaría con Pastor para que procediera a fijar una fecha al verse, ahora sí, dispuesto a presentarse al debate de investidura.
Ni Rajoy ni Rivera avanzaron a los periodistas en sus respectivas comparecencias -tras la reunión que han mantenido en el Congreso- cuál sería esa fecha, aunque el líder de Ciudadanos sí ha admitió que el presidente en funciones se la había adelantado.