En lo que va del año tres personas fallecieron por ese mal en Trinidad, en el nordeste, una de las más castigadas por incendios, dijo el director de Epidemiología, Wilfredo Camargo.
``La quema de pastizales hace huir a las ratas del monte hacia los centros urbanos y buscan refugio en las casas, donde vive la gente'', dijo. El año pasado en Trinidad se reportaron dos casos de fiebre hemorrágica y en lo que va del presente ya son cuatro, tres de ellos mortales, explicó.
Los brotes obligaron a las autoridades a declarar alerta sanitaria en varias zonas del país. La ministra de Salud, Nila Heredia, anunció el jueves el envío de brigadas para evitar la propagación de peste bubónica en la región selvática al norte de La Paz, donde se confirmó la muerte de un joven por ese mal.
Hay otros casos sospechosos en el municipio de Apolo, cerca de la frontera con Perú, dijo el jefe de Epidemiología de La Paz, René Barrientos.
En Santa Cruz, 530 kilómetros al sureste, los hospitales reportaron un incremento en infecciones respiratorias por la densa nube de humo que cubre la ciudad desde hace varios días y las consultas en los centro públicos estaban abarrotadas.