Recientemente, la Cofradía del Aguardiente y del Vino de Liébana organizó, en Potes, la II Fiesta de la Vendimia, que volvió a convocar a numerosas personas deseosas de disfrutar de la programación festiva y de los muchos atractivos paisajísticos que tiene la zona.
Más de 20 cofradías gastronómicas de Cantabria, España e, incluso, de Portugal, acudieron al Gran Capítulo de la Cofradía del Aguardiente y Vino de Liébana, que se hizo coincidir con la fiesta. Hubo nombramiento de nuevos cofrades, desfiles, folclore y el nombramiento del Vinatero Mayor, título que este año recayó en Manuel Gómez, veterano hostelero, propietario del restaurante Casa Cayo y, a la vez, amante del campo y la ganadería. No faltó el pisado de la uva y la degustación de vinos de Liébana.
Pedro Antonio Elena, enólogo de la bodega Lusía, una de las tres que sacan al mercado caldos de Liébana, explica que las características básicas del vino son el viñedo viejo, -aunque se está plantando algo nuevo-, que le da complejidad, sabiduría, soporte y estructura. La variedad Mencía la usan en la bodega para hacer los vinos más jóvenes, más afrutados. Hay , además, tempranillo que se emplea para que mantenga la Mencía y para lograr un vino un poco más largo en estancia.
“De la Mencía sacamos la fructuosidad y del tempranillo la estructura y de la tierra la mineralidad, lo que hace que tengamos unos vinos especiales y diferentes a los de otros sitios de España, ni mejores, ni peores”, indica el enólogo.
FIESTA DELCOCIDO LEBANIEGO
Al día siguiente, Potes fue escenario de la V Fiesta del Cocido Lebaniego, plato típico y representativo de la oferta gastronómica de la comarca. Del programa que tuvo charlas, exposiciones, degustación de cocido y folclore destacó la concesión del “Garbanzo de Oro”, que, en esta ocasión la Cofradía del Aguardiente y del Vino de Liébana a once mujeres representantes de la cocina tradicional lebaniega, que han trabajado durante años en restaurantes de la comarca..
El garbanzo lebaniego es uno de las seis variedades que existen de esta leguminosa en España, cuya producción se quiere recuperar ya que en los últimos años casi había desaparecido. Se cultiva en las zonas más bajas de la comarca y su característica principal es su pequeño tamaño. Es la base principal del cocido lebaniego.