Sea cual sea el color de la piel, una persona puede perder la pigmentación como consecuencia de una enfermad llamada vitiligo. Según la Sociedad Chilena de Dermatología, de la Clínica Alemana de Santiago de Chile, esta patología es relativamente frecuente y afecta aproximadamente al 1% de la población general. Con una reciente entrada en uso de la luz UVB banda angosto (UVB ba) para el tratamiento de esta enfermedad, el panorama ha cambiado completamente, porque este exitoso procedimiento ha demostrado entregar eficacia y tolerancia.
El Dr. Raúl Cabrera, jefe del Servicio de Dermatología de Clínica Alemana, trató con este método y estudió desde 2007 a 227 personas con vitiligo (111 hombres y 116 mujeres), todos pacientes de este centro de salud. La edad promedio del grupo es de 30 años (en rango de 4 a 70 años todos).
El grupo completó una fototerapia de UVB, de al menos, cuatro ciclos de 24 sesiones cada uno.
Conclusiones
Se pudo concluir que al cabo de 96 sesiones- las que se realizaron tres veces a la semana- se alcanzó aproximadamente un 65% de recuperación en todo el universo de vitiligo tanto segmentario, es decir, que afecta a un área circunscrita de la piel como no segmentario, que son aquellos que se pueden presentar en cualquier sector (universales, generalizados y en distintas partes). Además, se observó que la zona que mejor respondía era la cara, alcanzando un promedio de 80% de repigmentación.
¿Es positivo el resultado en todos los pacientes?
“Si bien el tratamiento fue exitoso en todos se pudo observar que lo pacientes tienen distintas velocidades de respuesta al tratamiento. Clasificamos como ultrarrápidos a aquellos que en apenas dos meses mejoraron completamente y llamamos respondedores lentos a los que en el mismo tiempo no superaron el 10% de repigmentación. Sin embargo, después de ocho meses de tratamiento igual alcanzaban un 55% de mejoría”.
¿Qué se pudo determinar respecto a las causas de esta enfermedad?
“Se observó que a los pacientes con vitiligo no se les desataba esta enfermedad por una depresión u otro problema psiquiátrico, sino a la inversa. Los infructuosos tratamientos para combatir esta enfermedad hacían que los afectados entraran en un estado depresivo. Además, se determinó que existen condiciones autoinmunes asociadas al vitiligo como tiroiditis y alopecia areata, entre otros.”
¿Cómo aparta esta investigación en el tratamiento del vitiligo?
“Esta investigación corresponde al estudio con mayor número de casos tratados en Latinoamérica, y se pudo comprobar que es una cura exitosa, que entrega porcentajes de mejoría no vistos hasta ahora. Sin embargo, el principal aporte es que ha permitido describir las distintas velocidades de respuesta de los pacientes a la luz ultravioleta UVB banda angosta. Esto también está relacionado con la zona tratada y la edad del paciente”, concluye el Dr. Cabrera.