Once personas, entre ellas siete policías, murieron este martes en el centro de Estambul y 36 más resultaron heridas en un atentado con coche bomba contra un vehículo policial, atribuido a los rebeldes kurdos del PKK.
Al parecer el coche bomba fue activado por control remoto y después de la explosión se produjo un tiroteo, según la agencia de noticias pública Anadolu, aunque existe cierta confusión sobre este extremo.
Turquía se encuentra en estado de alerta por amenaza terrorista y Estambul ha sido escenario este año de dos atentados suicidas atribuidos al yihadista Estado Islámico en lugares turísticos y que causaron una quincena de muertos.