El Papa recibe al presidente de la República Dominicana

El Vaticano dijo en un comunicado que en la reunión se puso de "manifiesto el papel de la República Dominicana en la organización de las ayudas humanitarias en Haití".

República Dominicana ha convocado a una Cumbre Mundial sobre Haití que se hará el 2 de junio y donde se propone crear un fondo de 5.200 millones de dólares para la reconstrucción del país tras el terremoto del 12 de enero.

El Vaticano dijo que la conversación se desarrolló "en un clima de cordialidad", en que se apreció "la gran contribución que ofrece la Iglesia al desarrollo del país, especialmente en campo educativo y sanitario, donde presta una atención particular a los más necesitados".

"También se ha subrayado la importancia de seguir promoviendo la vida humana, desde la concepción a la muerte natural", agrega el comunicado.

Posteriormente hubo un intercambio de opiniones sobre el compromiso de las autoridades dominicanas para afrontar los problemas sociales que afligen a su país.

La audiencia se celebró en la Biblioteca privada del Papa y duró veinte minutos, tras la cual ingresó a la sala la comitiva presidencial de quince personas, entre ellas, los ministros de Economía, Inversiones y Exportaciones, Administración de la Presidencia y el viceministro de Exteriores.

Al entrar a la audiencia, Fernández le dijo al pontífice en español: "Le traigo el afecto de todo el pueblo de la República Dominicana", y le regaló un rosario de madera, típico de su país.

"Es precioso, que bello", respondió Benedicto XVI, también en español, y le regaló al mandatario la medalla en oro de su pontificado.

Al despedirse, Fernández le expresó su deseo de que "si Dios quiere, pueda venir a la República Dominicana".

Esta es la segunda vez que Fernández se reúne con un Papa en el Vaticano. Ya lo hizo el 18 de enero de 1999, cuando fue recibido por Juan Pablo II, al que invitó a viajar al país caribeño, donde había estado en 1979, 1984 y 1992.

Fernández se reunió luego con el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, a quien acompañó el arzobispo Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados.